Son dos de los clubes más importantes en su país y se han enfrentado varias veces a lo largo de la historia. A finales de los 70 ‘azucareros’ y ‘xeneizes’ pelearon el título de dos Copas Libertadores. Bajo el mando de un argentino los vallecaucanos vivieron buenos momentos.
Deportivo Cali fue subcampeón en 1976 bajo el mando de Néstor Raúl Rossi y clasificó a la Copa Libertadores de 1977. Para esa temporada contrataron a un joven Carlos Salvador Bilardo de 39 años que venía de dirigir a Estudiantes de La Plata. Los verdiblancos lideraron el Grupo 2 de la Libertadores por encima de Bolívar de La Paz, Oriente Petrolero y Atlético Nacional. En aquel momento los clasificados disputaban dos triangulares semifinal y de ahí salían los finalistas.
Los ‘azucareros’ no iniciaron bien al empatar sin goles en el Pascual Guerrero ante Libertad de Paraguay. Posteriormente, debía enfrentar a Boca Juniors dirigido por Juan Carlos Lorenzo y que contaba con jugadores como: Hugo Gatti, Alberto Tarantini, Roberto Mouzo, Rubén Suñé, Jorge ‘Chino’ Benítez, Ernestro Mastrángelo, entre otros. El equipo Xeneize jamás había ganado una Copa Libertadores.
(Vea también: La advertencia de Bilardo cuando fue con el Cali a La Bombonera)
La llegada de Boca Juniors a Cali en ese agosto de 1977 fue tensa por que el técnico Lorenzo se enfrascó en una discusión con los periodistas locales que se sintieron irrespetados. Ya en el estadio cuando sonó el himno argentino hubo silbidos por más de 50.000 personas y eso incomodó a los visitantes. Nésto Scotta abrió la cuenta a los 25 y Gatti perdió un invicto de 738 minutos. Pedro Sá igualó a los 45 y tras un mal comportamiento de los recogebolas el árbitro los echó para el segundo tiempo. El partido finalizó empatado y dejó en una difícil posición al Cali.
Boca Juniors madrugó para regresar a su país al siguiente día. En el lobby del hotel se encontraba Fernando García Lloreda, ejecutivo de la Corporación de Ahorra Gran Vivienda, que iba a visitar a un amigo e intercambió varias palabras con los jugadores argentinos. Todo fue subiendo de tono y los futbolistas agredieron al hombre que terminó con varios hematomas en la cara y el cuerpo por lo que García Lloreda hizo una denuncia.
Para que no se impidiera el viaje a Argentina, Boca Juniors envió un comunicado público y al juez segundo penal: “Extensivas disculpas a la ciudadanía de Cali y al hermano país colombiano, porque un hecho de esta naturaleza lesiona nuestro nombre y los lazos de amistad que unen a nuestros países”. Los directivos del Deportivo Cali también intervinieron para solucionar el problema y al final pudieron viajar.
Los ‘azucareros’ perdieron en Paraguay con Libertad y en la última fecha solo iban a La Bombonera por cumplir porque Boca Juniors ya era el finalista. De común acuerdo se decidió no poner los himnos para evitar silbidos e insultos. A los argentinos les dolió que Bilardo no se hubiera pronunciado por el irrespeto al himno argentino en Cali siendo él uno de sus compatriotas. Por tal motivo, la hinchada cantó: “Colombia, Colombia, Colombia corazón. Boca te perdona, pero no al ‘narigón’”.
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