La doble limpieza ayuda a prevenir la aparición de puntos negros, retrasar la aparición de líneas de expresión y acondiciona la piel para que los productos que vayamos aplicar en la rutina actúen mejor y cumplan su función, y así tener la piel hermosa que deseamos.

Esto permite que nuestro rostro quede totalmente limpio que los poros no se obstruyan ni nos quede ningún tipo de suciedad o residuo de maquillaje, esta técnica de belleza potencializada en Corea y en Japón, es fundamental que se haga con dos pasos una oleosa y otra acuosa.

Para la fase oleosa, qué es la primera que debemos emplear, podemos encontrar formulaciones en bálsamo y aceites para desvanecer todo el maquillaje, en cuanto tocan el calor de las manos se desvanece y también permite que al contacto con el agua se desvanezca rápido sin dejarnos sensación de grasa en nuestro rostro.

(Vea también: Lecciones que aprenderán los signos del zodiaco en noviembre, según el horóscopo)

Para la fase acuosa aplicaremos el limpiador adecuado para nuestro tipo de piel en presentación de espuma, crema, gel o leche limpiadora, su función es retirar el maquillaje y los residuos que nos dejó la fase oleosa de una forma suave que no nos dañe las pestañas y las cejas y lo más importante es que no nos dejará la piel tirante.

Cuando compremos un limpiador es muy importante que no nos reseque la piel, que no retire las grasas que deben quedar naturalmente sobre nuestra piel, También podemos encontrar productos que vienen las dos fases, que es la oleosa y la acuosa que al batirlo se juntan las dos fases, su formula permite que la piel quede hidratada y dispuesta a la aplicación de nuestra rutina facial.

Principales beneficios: desvanecer exceso de sebo, protector solar, impurezas que se van quedando en el día sin permitir que queden estas impurezas en los poros.

Es por eso que debes implementarlo lo mas pronto posible a tu rutina facial.