Desde hace cinco años que atiendo por videollamada a personas que se enfrentan a una crisis de pareja. Unos aparecen y no pueden ni hablar de lo que les ha ocurrido, otros lo hacen llorando, y hay quienes hablan y patinan sobre el mismo recuerdo porque no consiguen avanzar, salvo cuando me dejan moverles un poco la ficha. Para todos ellos descubrí que hay un elemento que les ayuda un montón: su nueva libreta secreta.

La idea es que después de su consulta puedan tener un elemento que les pueda servir de vaciador. Yo sé que en cuanto nosotros terminamos la llamada, la persona se siente escuchada plenamente, sabe que lo que me ha confesado le ha servido para desatascar y para organizar sus pensamientos, para darle algo de orden a su caótica mente y algo de consuelo a su corazón, que, muchas veces, está roto en veinte mil pedazos. Sin embargo, los días van a suceder entre consultas, y lo mejor que puedo hacer por esta persona es dejarle un canal para desahogarse. Y ya sea que la relación se reconstruya o pasen al divorcio, hay unos pasos que seguir en las crisis de pareja y que yo he estudiado cuidadosamente.

La libreta surgió hace ya cinco años cuando supe que una clienta tenía tal necesidad de contar lo que le pasaba, que vi en ella potencial para que escribiera sus pensamientos y pudiera darle alas a su vena de escritora.

Si bien arrancó con bastantes pensamientos sin conexión, ha seguido haciéndolo, cada vez con una voz más personal y cargada de detalles que enamoran. Dicha libreta le ha servido como objeto de sanación en su proceso.

A mí me ha sorprendido la aceptación que ha tenido la libreta como método para seguir confesando y escribiendo los pensamientos que pasan por la cabeza de mis clientes. Sé que algunos apenas pueden dibujar o escribir cosas, pero con el paso del tiempo van ganando confianza y lo que empieza con leves trazos, termina siendo un delicioso confesionario personal.

La libreta es eso, un objeto secreto y personal, sé que ahí van a aparecer grandes verdades y por eso incido en la necesidad de que sea secreta. Si algo quieren compartirme de su libreta, les permito que me lean una página, o si están muy embalados, que me dejen ver una foto de una página. 

Sé que la libreta les acompañará en los días duros, sé que le irán tomando cariño a su libreta y que verán que la escritura es una de las actividades que más ayudan a expresar y a organizar los sentimientos mientras llega el día de nuestra siguiente consulta. Es curioso ver que incluso al más descreído la escritura le ha resultado beneficioso, y para aquellos que tenían más tendencia al dibujo que a la narración, les pedí que se expresaran como mejor les pareciera, y empezaron con dibujo y luego recurrieron a las letras.

De momento, cada uno de mis clientes escribe, y sigo recomendándoselo a todos porque sé, de corazón, que va a servirles a sanar su relación y a llegar a un perdón real que les permitirá avanzar en su vida, que es lo que buscan cuando vienen a mí.

Si necesitas una consulta privada conmigo puedes escribirme a este WhatsApp. Todas mis consultas son ‘online’, desde la comodidad de tu teléfono.

Sígueme en Facebook: María Pasión la Doctora Corazón o en Instagram @mariapasioncoach

Encuentra todas las columnas de María Pasión en este enlace.

*Las opiniones expresadas en este texto son responsabilidad exclusiva de su autor y no representan para nada la posición editorial de Pulzo.