Personas de otras ciudades de Colombia también están llegando hasta los albergues dispuestos para los habitantes de las poblaciones aledañas al río Cauca que tuvieron que dejar sus hogares, aseguró el directivo en información que entregó a medios.

Maya aseguró: “se nos está presentando una situación muy complicada. Está llegando gente de otras partes y está llegando gente venezolana; y lo tengo que decir así porque nos están generando muchas dificultades”.

Se desconoce el número exacto de personas que hayan conseguido infiltrarse porque “aparentemente por otros lados hacen inscripciones” a las que la empresa no tiene acceso y no han podido darse cuenta si hay personas que no son de la zona. Pero sí han notado que “no solo son venezolanos, sino gente de Cartagena y de otras zonas del país”, recogió RCN Radio.

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Agregó que ya no saben quiénes son las personas que fueron censadas en un principio y los que merecen los subsidios. “Hay mucha gente que está accediendo a ese subsidios y la idea es que los que están en Valdivia se pueden desplazar a donde un familiar y alquilar en otras poblaciones que no estén en la zona de riesgo”, puntualizó el directivo, citado por Caracol Radio.

EPM indicó que esos subsidios se están entregando a los habitantes del corregimiento de Puerto Valdivia porque en otras zonas o municipios no han tenido desplazamientos masivos por la emergencia.

Las ayudas económicas van desde $ 1’100.000 hasta $ 1’300.000 dependiendo de la cantidad de personas por familia y el lugar al que deseen desplazarse, agregó Blu Radio.

Entre tanto, las autoridades confirmaron que no se ha superado la emergencia y que hasta que no exista un control total del proyecto y del caudal del río, las alertas continuarán. Por eso fe necesario que en las últimas horas EPM evacuara por seguridad y prevención a los trabajadores de la hidroeléctrica luego de que se presentara un movimiento de tierra en la ladera de una de las montañas que colinda con el proyecto.

La emergencia en Hidroituango comenzó en la madrugada del 7 de mayo cuando se produjo un derrumbe en la zona en la que se construye la central eléctrica, lo que ocasionó “un taponamiento total en el túnel” que desvía el río Cauca, el segundo afluente de mayor cauce en el país, durante las obras.

Lo anterior generó “una reducción” de su caudal aguas abajo y “un embalsamiento de la presa” aguas arriba, por lo que los ingenieros decidieron inundar el cuarto de máquinas de la central para permitir que el río siguiera su curso, lo que sumado a las fuertes lluvias aumentó el caudal del Cauca.

EPM aseguró el miércoles pasado que cumplió con la meta de elevar a 410 metros el muro de contención de la presa, un “paso importante” para mitigar el riesgo de avalancha.

La próxima meta es llegar a 415 metros y prepararse para las lluvias de octubre y noviembre, además de asegurarse también de que el muro de la presa pueda resistir crecientes aún mayores.