“¿Usted cancela el servicio y nos está hablando así?”, le pregunta al conductor una de las mujeres, por el trato que estaban recibiendo.

“No, no, no, no. Ya, ya, ya. Listo”, responde el hombre para callarlas, y suelta su ‘perla’: “¿Quién las manda a que vivan por allá tan feo, en lo feo?”.

“¿¡Perdón!?”, interrumpe la mujer, asombrada. “No sea grosero, señor”.

“¿Quién las manda a que vivan por allá en lo feo?”, insiste el conductor.

“Esta es la manera en que este Uber nos está tratando”, agrega la mujer, dirigiéndose a su celular, consciente de que estaba grabando la situación.

El artículo continúa abajo

“Bueno. Ya, ya, ya, ya, ya… Ábranse, ábranse”, responde otra vez el conductor.

La pasajera advierte que va a denunciar al conductor con la plataforma Uber, para que no pueda volver a trabajar, y el conductor hace como si se fuera a bajar del vehículo: abre su puerta aparatosamente, pero después se vuelve a sentar.

El tono de voz de las dos partes se eleva, y el caso ilustra las dificultades que pasan quienes viven en sitios alejados y requieren de servicio de transporte.

Este es el video publicado por ‘Bogotá al desnudo’: