La inconsolable mujer habló en medio del llanto con Noticias Telepetróleo, y allí contó que el día de los hechos (sábado 27 de julio) su hijo Rafael Caro Álvarez, de 16 años, había ido hasta La Fortuna (Barrancabermeja) a comprar “algo para el almuerzo”.
No obstante, dice ella, su hijo le contó que al pasar por la base militar La Lizama, que queda a un costado de la carretera, tuvo un altercado con varios soldados. Esto, por un problema entre ellos que viene de tiempo atrás.
“Me dijo: ‘Mamá, póngame cuidado. Bajé a traer algo para hacer el almuerzo con Jhon y los soldados salieron de la base y nos agarraron a plan. Me dieron ‘reduro’, mami. Y ya voy para la casa a traer mi machete. Los voy a enfrentar: me matan o los mato, pero que ya no nos golpeen más. Usted viera, mami, me reventaron…”.
La mujer contó en el medio regional que aunque le advirtió a su hijo que se controlara y “dejara de bobadas”, casi 15 minutos después de hablar con él recibió una llamada trágica: “Me llamaron… que me lo habían matado”.
Este momento quedó registrado en un video, y allí se aprecia que Caro llega hasta la base militar armado con un machete y acompañado de otros jóvenes.
Repentinamente, el menor salta la barricada con la intención de llegar hasta donde están los militares, y es ahí cuando le disparan (suenan al menos siete tiros).
Pero Dioselidia Álvarez cree que la situación no era tan crítica como para que mataran a su hijo, pues dice que en la base había varios militares armados que pudieron haberlo inmovilizado.
“Lo único que le pido a Dios es que me ayude y me dé el valor de perdonar, porque esto no se hace. Yo sé que mi hijo era altanero, rebelde, pero si había tantos soldados en la base cuando él ingresó, hombre, ellos podían si querían inmovilizarlo. Péguenle un tiro en un pie…”, expresó la mujer en Telepetróleo.
La madre también contó que el problema entre Rafael Caro y los militares inició hace unos seis meses, y que por eso el pasado viernes se enfrentaron en vía pública ya que uno de ellos, aparentemente, golpeó a un amigo de su hijo en el rostro en medio de una requisa.
“Uno de esos militares sacó la mano y se la templó a ese muchacho en la cara, y él se alteró demasiado y empezó a darle roca y a gritar. Y mi hijo, que estaba donde la vecina, salió y le preguntó que qué pasaba, y el muchacho le dijo que los militares le habían pedido una requisa pero que tenía que ser con video y foto, y que él le había dicho que no tenían derecho y que le habían pegado”, aseguró Álvarez.
La madre espera que todos estos detalles que reveló los tengan en cuenta en medio de la investigación, pues la Fiscalía ya dijo que en un principio “la hipótesis apuntaría a un homicidio culposo”, pues de acuerdo con los análisis de criminalística el disparo “iba no dirigido contra esta persona”.
Esa misma versión la entregó el general Nicacio Martínez, comandante del Ejército, que explicó en Blu Radio que el militar presuntamente disparó hacia al piso, pero que uno de esos proyectiles “rebotó” e impactó al menor.
“Cuando una persona vulnera la seguridad de una base militar, pues alguien se siente herido, se siente indefenso y acciona su arma. Por fortuna para nosotros es un arma que se acciona al piso, en la cual ese rebote, de esa bala, impacta desafortunadamente a este joven, quien resulta herido y fallece”, afirmó el oficial en la emisora.
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