Todo empezó este miércoles después de que el presidente Gustavo Petro comparara la nueva cárcel de El Salvador con un campo de concentración.

El presidente salvadoreño Nayib Bukele contestó diciendo que lo suyo eran “resultados” y no “retórica”, pero la discusión no paró allí.

Petro citó ese trino y dijo que en Bogotá se pasó de 90 a 13 homicidios por cada 100.000 habitantes entre 1993 y 2022, para lo cual “no hicimos cárceles, sino universidades”.

Petro le propuso un foro al respecto, pero Bukele respondió volviendo a cuestionar a Petro por varias cosas:

  1. El lapso en el que se consiguió, de 30 años.
  2. Que aparentemente se atribuyera lo conseguido en ese lapso: “¿Usted gobernó 30 años?”.
  3. Y por último preguntó por qué usaba datos de Bogotá: “¿No es usted presidente de Colombia?”.

Según él, en su país ya hay una tasa de un solo dígito en menos tiempos: “La reducción fue rápida, porque los muertos no se recuperan”, remató.

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Fue ahí que Petro sacó a relucir un consolidado de datos en el que se muestra la evolución de la tasa de homicidios en Bogotá. Eso sí, se la atribuyó al exalcalde Antanas Mockus, y dijo que es una experiencia que “bien merece la pena ser estudiada internacionalmente”.

Lo que el jefe de Estado colombiano no calculó, es que algunos observaron con detenimiento esos datos y encontraron que la notoria reducción en la tasa de homicidios tuvo su menor impacto, incluso con un leve aumento, durante la alcaldía del propio Petro, tal como lo resaltó el senador Miguel Uribe.

Bukele se conformó con retuitear lo dicho por Petro, aunque en sus cuestionamientos también había algunas falencias. Por ejemplo, que si bien Petro incurre en una falacia de muestra sesgada al hablar como presidente de Colombia mencionando solo a Bogotá, sus críticas se emitieron en el contexto de la inauguración de una universidad en la capital. Es por eso que, al mencionar la construcción de centros educativos como una forma de reducir la delincuencia, la reducción tenía una explicación.

Por otro lado, El Salvador tiene una población que recién en 2021 superó los 6 millones de habitantes, mientras que solo Bogotá tiene alrededor de 10 millones y es un número mucho más comparable con ese país que los aproximadamente 51 millones de colombianos.

Eso sí, también es muy distinta la dispersión geográfica de la población en una ciudad de 1.600 m² y un país de 21.000 m².