Por: El Colombiano

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Este artículo fue curado por Leonardo Olaya   Ago 15, 2023 - 7:30 am
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Cuando la Policía de Cali entró a la lujosa casa número 6 del conjunto privado El Mameyal, después de dos horas de llamados a la puerta y de utilizar la fuerza, se encontró al empresario y presunto feminicida Andrés Gustavo Ricci Díaz dormido en su cama doble, todavía con el revólver en la mano y el dedo índice en el gatillo; luego diría que en un cuarto de huéspedes del segundo piso estaba el cuerpo inerte, abaleado, de la patinadora Luz Mery Tristán, tendido en el piso, con un pie sosteniendo la puerta para evitar que la mataran.

Los policías trataron de despertar a Ricci Díaz, y en ese momento disparó el arma, lo que demostraría que estaba, o a punto de suicidarse, o que estaba decidido a enfrentarse a tiros con los uniformados. Según publicó el diario El Tiempo, “el empresario vestía una camiseta blanca de manga larga y unos jeans. Tras identificarse, señaló otra de las armas que estaba en la habitación y manifestó que había matado a su pareja”.

(Vea también: Exesposa del presunto asesino de Luz Mery Tristán ya lo había denunciado: “Casi me mata”)

Minutos después de esa irrupción de los policías, alguien llamó a la hija de Tristán: “Tenemos que decirte algo de tu mamá”, a lo que ella respondió: “La mató, ¿cierto?”.

Esa respuesta ha marcado una de las vetas de las autoridades, y es que la patinadora estaba inmersa en una relación dónde era maltratada psicológica y, quizá, físicamente, lo que para la Fiscalía configuraría el delito de feminicidio, la confirmación de que la mujer vivía en un entorno violento.

Ya se han conocido mensajes de la misma Tristán a algunas de sus amigas donde señalaba los celos enfermizos de su pareja, con quien pronto se iba a casar. Uno de ellos revelado por El Tiempo dice: “No sé qué es lo que le genera a él ese estallido en un momento dado y son los hijuepu… celos, la celopatía. Pero bueno, voy a escribirle algo lindo, pero me ayudas, porque quiero llegarle al corazón”.

Luz Mery Tristán vivía la cotidianidad de miles de mujeres en Colombia, ella misma le dijo a alguna de sus amigas que creía que podía hacer cambiar a Ricci, quien ya tenía antecedentes de maltrato con otras parejas, pero no pudo hacerlo y este hombre al que amaba al parecer se volvió contra ella con furia.

Es un drama. El Instituto Nacional de Medicina Legal y Ciencias Forenses registró este año con corte al 31 mayo 19.606 eventos de violencia contra las mujeres en los hogares y practicó 8.511 exámenes por presunto delito sexual. La Procuraduría General de la Nacional ha levantado 4.142 alertas para que las autoridades intervengan rápidamente en estos hogares donde el maltrato es pan de cada día.

Y es que todo parece indicar que el maltrato a Luz Mery Tristán era constante, pues en los últimos días se han conocido varios testimonios de familiares que aseguran que la deportista había sido golpeada por lo menos dos veces, pero siempre creyó que podía salir de la situación en pareja con ayuda profesional.

Ahora que se conocieron los resultados de la autopsia realizada por Medicina Legal se sabe que Tristán murió por “una herida por proyectil de arma de fuego a nivel de la región dorsal y otra herida a nivel del tórax”. Es decir: un disparo le habría atravesado la aorta. Sin embargo, antes de ser abaleada posiblemente desde un pasillo de la casa, pues ella se refugiaba en el cuarto de huéspedes, tuvo un enfrentamiento con Ricci; los médicos encontraron que tenía un golpe en el párpado superior derecho; el golpe que había recibido fue tan fuerte que “presentaba un hematoma que comprometía todo el globo ocular derecho”.

La mayor prueba del enfrentamiento es que Tristán tenía morados en los dedos y en los nudillos, lo que sugiere que se defendió como pudo mientras su feminicida la atacaba sin compasión; al parecer la persecución de este hombre sobre la expatinadora fue tal que los vecinos escucharon gritos y golpes. Luego, como ya se dijo, la mujer se escondió en el cuarto de huéspedes, cuya puerta la Policía encontró con cuatro disparos —a Ricci se le incautaron cinco armas de fuego, tres de ellas eran traumáticas—; en un baño se encontraron dos casquillos dorados en un baño y uno más en otra parte de la casa.

(Vea también: Detalles del crimen de Luz Mery Tristán: se iba a casar con el presunto asesino)

Entre las cosas que sorprendieron a los policías había una carta que, para algunos de ellos, pareció una coartada para envenenar la escena del crimen. Según reveló El Tiempo, en la misma habitación donde estaba el cuerpo de la deportista se encontró un sobre de manila en una mesa marcado así: “Solo si nos pueden velar a los dos en la sala en la que velaron a mi mamá (sic) nos queríamos ir no lo entenderán. Todo parece indicar que se trataría de una ardid para embolatar la investigación.

En este momento Ricci se encuentra sin abogado y se conoció que pidió perdón a la familia de Tristán; al parecer buscaría que el crimen fuera tipificado como homicidio agravado y no como feminicidio agravado, delito este último por el que tendría que pagar hasta 45 años de cárcel.

Antecedentes de Ricci

La Fiscalía va hasta las últimas consecuencias y se está haciendo a todo un material probatorio que cuenta con el pasado de Ricci como presunto maltratador de mujeres.

Y es que hace poco, y a raíz del asesinato de Luz Mery Tristán, se conoció una reveladora denuncia por parte de la exesposa de Ricci.

En una publicación a través de redes sociales se supo que María Del Pilar Jaramillo, la exesposa de Andrés Gustavo Ricci, lo había denunciado abiertamente por los maltratos que habría sufrido durante su matrimonio. “Me amenazó que su novia me iba a demandar por ponerla en las redes, la verdad todo esto lo estoy haciendo porque siempre me quedé callada, estamos acostumbrados a la violencia desde siempre”.

La publicación, que realizó en su Facebook en el año 2017, ha resurgido en medio de la investigación en curso sobre el asesinato de Luz Mery Tristán y arroja luz sobre posibles antecedentes de comportamiento violento por parte del presunto feminicida. Según la exesposa, la relación con Ricci estuvo marcada por episodios de abuso emocional y físico.

Jaramillo señaló en la publicación los maltratos que sufría por parte de Ricci. “Él me pegó muchas veces, me prohibía salir con mis amigas, y yo, que es lo peor de todo, lo permitía, me trataba de perra, recibí mucho maltrato de parte de él y yo lo permití, llevo cinco meses tomando pastillas antidepresivas y tratando de recuperarme”.

Además, denunció en aquel momento que Ricci le reprochaba a su pareja sentimental que lo único que quería de él era su dinero. “Y hoy ya me sentí decidida fue con la amenaza de demanda y además que diga que lo único que quiero es el dinero. ¿Me pregunto cuál dinero?”.

En el mensaje, la exesposa indica que conocía de más maltratos infligidos por Ricci e incluso casi llega a asesinarla. “Yo he sabido de más maltratos y no solo conmigo, yo decidí dejarlo la última vez porque casi me mata y encima de eso me quería hacer sentir culpable”. “Ya no me importan las consecuencias, yo sé de qué eres capaz, pero ya no te tengo miedo”, concluye.

El caso por ahora sigue abierto, sin embargo, la Fiscalía está más que segura de sacar adelante su tesis de feminicidio, la cual parece más que evidente.

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