Después de casi un año de investigación, la Policía Metropolitana de Bogotá y la Fiscalía General de la Nación lograron desarticular la banda criminal ‘El Laguito’ que instrumentalizaba menores de edad para la venta de estupefacientes en el norte de la capital.

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La organización criminal operaba en la localidad de Suba, especialmente en los barrios La Estanzuela, Rincón y Villa Elisay y contaba con una trayectoria delincuencial de 5 años, afectando aproximadamente a 5.000 estudiantes y residentes del sector, quienes eran sus principales focos del negocio ilegal de drogas.

Adicionalmente, las autoridades informaron que las rentas ilícitas de ‘El Laguito’ eran aproximadamente de 936 millones de pesos al año, con una capacidad de distribución de 18.000 dosis al mes, de distintos tipos de droga.

Además de 9 capturas por orden judicial y 11 diligencias de registro y allanamiento, con la operación denominada ‘San Nicolás’ “se logró materializar la aprehensión de un menor de edad, que transportaba estupefacientes camuflados en panes de 5.000 pesos para evitar ser detectado por las autoridades”.

Precisamente, camuflar los estupefacientes en otros productos y utilizar fachadas de vendedores ambulantes, eran algunos de los métodos utilizados por el grupo delincuencial para pasar desapercibidos de las autoridades.

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Así las cosas, las autoridades aseguraron que “los delitos por los que deberán responder los presuntos implicados son: uso de menores de edad en la comisión de delitos, tráfico fabricación o porte de estupefacientes y concierto para delinquir”.

Por otro lado, dicha estructura delincuencial tenía disputas territoriales con otras redes de microtráfico por el control territorial del sector, generando dos homicidios por disputas entre los integrantes de dichas estructuras.

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