Una serie de testimonios que señalan al docente Edwin Murillo Amaris como un hombre que intimida a sus estudiantes se conocieron en las últimas horas.

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Aunque el profesor fue desvinculado de la reconocida institución educativa en 2016 por denuncias relacionadas con acoso, al parecer no hubo consecuencias mayores para el pedagogo.

Tres jóvenes que hicieron parte de la Facultad de Ciencias Políticas de la mencionada universidad contaron en Semana sus casos y dejaron al descubierto el extraño comportamiento que tenía Murillo Amaris con algunos de sus alumnos.

Relatos de acoso en Universidad Javeriana

El primer testimonio recogido por la revista aseguró que el profesor le había propuesto acostarse con él como pago de un intercambio al que había ido en Estados Unidos. Incluso, contó que en Cartagena vivió un duro episodio con él.

“Empezó a escribirme por WhatsApp, a decirme que era divino. Mandaba videos de hombres, que para que me acostumbrara. No entendía. Logré un trabajo con la facultad y en un viaje a Cartagena, borracho, perdí el conocimiento. Cuando desperté, iba en un taxi y él me estaba acariciando la cabeza, casi me boto del carro ahí en la plaza de armas”, le dijo al mismo medio.

Luego, agregó: “El acoso siguió, yo tenía un cubículo de trabajo y él se metía a tocarme, a besarme, a decirme: ‘Amor, estás muy lindo’”.

De acuerdo con el denunciante, al profesor lo retiraron de su cargo y lo enviaron para el Amazonas. Sin embargo, el nuevo decano le pidió hablar con el rector —Jorge Humberto Peláez— y desde las directivas le dijeron que no podían hacer nada. “La reparación que nos ofrecieron fue sacarlo de la facultad, pero no de la universidad”, afirmó en la revista.

Otro de los testimonios es muy similar. Según el joven que expuso su caso, todo comenzó en 2012 y Edwin Murillo trataba de acercarse a estudiantes sobresalientes.

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“Me pidió ir a la oficina y me dijo que la comunicación que quería conmigo era ‘discreta, por debajo de cuerda’. Empieza a hacer comentarios como ‘eres muy lindo’, a hablar de relaciones entre hombres, se hizo recurrente, hasta pedirme que fuera el novio, todo a cambio de privilegios”, mencionó el estudiante en Semana.

El joven aseguró que una vez el profesor fue ascendido a decano todo empeoró, pues tenía poder sobre las decisiones de su carrera, de los eventos hechos desde la academia, entre otros.

“La facultad no hizo nada, a pesar de saber lo que sucedía”, concluyó.

La revista aseguró que trató de contactarse con el profesor señalado para que entregara su versión, pero el hombre dejó de responder los mensajes que se le enviaban al celular. El medio sí aclaró que Murillo Amaris en 2016, cuando las autoridades universitarias conocieron de sus comportamientos inadecuados, se desvinculó como decano de la Facultad de Ciencias Políticas y como profesor.