Todo se debe al incumplimiento de un contrato de imagen de Tardar, que es más conocida como ‘Grumpy Cat’ (gata gruñona). El acuerdo entre Bundesen y la empresa permitía disponer de la imagen de la gata únicamente en un café helado bautizado “Grumpuccino”, que puede ver a continuación:

Sin embargo, la compañía usó la imagen de la gata para promocionar otros productos sin autorización, como un café tostado y camisetas ‘Grumpuccino’, informó BBC.

De acuerdo con AFP, en la demanda introducida el 11 de diciembre de 2015, los abogados de Bundesen argumentaron que “la despreciable conducta del acusado le dio efectivamente una razón a Grumpy Cat y a su dueña para estar ‘grumpy’ (enojados)”.

Getty Images.

El contrato de comercialización de la imagen se firmó en 2013 y, según la demanda, Grenade lo violó repetidamente “creando y explotando productos no autorizados con la marca Grumpy Cat”.

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Esta semana, un jurado federal de California falló a favor de la gata y su dueña, por lo que Grenade tendrá que pagarles 710.000 dólares (1.985 millones de pesos) por infracción de derechos de imagen, y un dólar de más (2.793 pesos) como una cantidad simbólica, indicó BBC.

De acuerdo con ese medio, la expresión de enfado de la gata sería causada por el enanismo felino, “que hace que la mandíbula inferior se extienda hacia delante”.

AFP recordó que esta gata se convirtió en un fenómeno al aparecer en varios programas de televisión e incluso en una función del musical de Broadway ‘Cats’. Ha sido portada del Wall Street Journal y de la revista New York, y actualmente tiene una estatua en cera en el museo Madame Tussaud de Washington.

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