Para empezar, hay que dejar claro que cada cargador se desarrolla para un dispositivo en específico y no todos sirven para el mismo móvil. Esto es porque las baterías se recargan todas de manera diferente; algunas utilizan los valores máximos del cargador al comienzo y cuando llegan al 80% reducen la capacidad para no forzar ni dañar la batería, según El Androide Libre.

Es por eso que cuando compre un cargador diferente al original, puede correr el riesgo de que no alcance los valores mínimos de carga que tiene el teléfono y finalmente tenga que desecharlo porque no va a funcionar para ese tipo de dispositivo, mencionó el mismo medio.

Por otro lado, si adquiere un cargador que sobrepase los niveles de corriente del teléfono, podría terminar dañando la batería, pues no todos los celulares tienen la función de Carga Rápida y la batería terminará recalentándose. Hay que ser cuidadoso con este punto, ya que en un caso extremo el teléfono o el cargador podrían explotarse por la cantidad de electricidad que están almacenando, de acuerdo con ese portal.

Sin duda, es mejor evitar este tipo de problemas comprando cargadores de buena calidad que le aseguren que su teléfono tendrá los niveles de carga adecuada y se demorará el tiempo que es estrictamente necesario.

No se preocupe si por razones extremas, tiene que cargar su teléfono con un cargador diferente al original, por una vez que lo haga, su batería no se va a dañar ni a explotar, pero asegúrese de que no pase muy a menudo.