Rosas, que dio a conocer su caso por redes sociales, contó que en principio entendió que el señalado, de 23 años, estuviera detrás de ella porque el bus estaba muy lleno. No obstante, poco a poco, cuenta ella, el alimentador se fue desocupando, pero el hombre no se apartaba.
“No se quería alejar. Cuando me corrí, él tenía el pene erecto, y eso era lo que yo sentía. Yo sentía un bulto detrás mío, pero yo no quería hacer falsas acusaciones. Pero me di cuenta que sí tenía razón cuando le vi su pene erecto”, contó la víctima.
La joven dijo que le lanzó una cachetada al hombre y que ahí se “volvió loca”, reacción que quedó grabada en un video que ella misma compartió, en el que el hombre acepta que sí la estaba acosando.
Asimismo, Rosas denunció que el hombre le dejó marcas en uno de sus brazos porque el señalado la agarró fuerte, cuando ella lo agredió.
De acuerdo con Citynoticias, policías del CAI El Recreo, del sur de Bogotá, atendieron la denuncia de la joven y capturaron al señalado, al que pusieron a disposición de un juez de garantías de la URI de Kennedy.
Por este deplorable comportamiento, el acusado puede enfrentar cargos por el delito de injuria por vía de hecho, que es conciliable con la víctima. Sin embargo, si no se llega a un acuerdo entre las partes, el hombre podría ser condenado a cuatro años y medio y a pagar una multa de 8 millones de pesos.
Entretanto, la víctima señaló, en el informativo, que de esas “personas que se suben al transporte masivo” a acosar a los otros usuarios, es de “donde salen los futuros violadores”.
La Secretaría de la Mujer también se puso al frente del caso y le brindara asesoría a Rosas, indicó el medio.
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