author
Escrito por:  Diego Rey
Periodista     Dic 10, 2024 - 5:53 pm

Carlos Eduardo Valdés Moreno, ex director de Medicina Legal y quién ha ocupado cargos públicos durante décadas en investigaciones forenses, confesó recientemente que transportó al Aeropuerto Internacional El Dorado de Bogotá, un cadáver en un avión comercial, en su equipaje de manos, ocultando tal información a la tripulación.

(Vea también: “30 años de mal”: surge otra versión (fuerte) sobre la muerte de Sandra Reyes)

Asegura que la medida la tomó debido a la rigurosidad de la investigación que involucraba a funcionarios públicos en el crimen, los restos fueron camuflados entre material fílmico que sería utilizado como evidencia.

“Hay que aclarar que un cadáver esqueletizado lo ubicamos en el morral. Es más, teníamos que viajar en un avión comercial, y no podía mandarlo por equipaje. Teníamos que mandarlo por equipaje de mano, pero para impedir que pasara por los rayos X tuve que, dentro de ese morral, meter algunas películas y rollos de esa época y argumentar, con base en que yo era una autoridad, que por favor no pasaran ese equipaje por rayos X porque iban a dañar toda una serie de evidencia magnética que traían, y me lo permitieron”, dijo el científico forense en una entrevista que dio en exclusiva a Realidades, un espacio de reportajes y entrevistas dirigido por la periodista Angélica Barrera.

Valdés reafirmó que es la primera vez que habla del tema. “Traje el cadáver en un avión comercial, allá, en una maleta, guardado ahí en el portaequipajes”, y explicó que la decisión la tomó la investigación se llevó a cabo en un fuerte militar, los funcionarios del mismo estaban involucrados en el crimen y si alguien sospechaba del hallazgo que él había hecho se podía afectar la investigación, sus palabras textuales fueron:

“Hay cosas locas que yo he hecho que se las atrevo a confesar aquí, por ejemplo, dormir con un cadáver en una bolsa, en un alojamiento militar, dormir con el cadáver. Nadie podía saber que yo tenía el cadáver, porque en ese establecimiento militar, militares de esa guarnición habían participado en ese homicidio. Donde supieran que estaba ahí, perfectamente podían desaparecer ese cadáver”.

Impresionante historia de un forense colombiano

Entre las otras confesiones que hace el exdirector de Medicina Legal está el hecho de que un día, tuvo que esconder la cabeza de una víctima de desaparición forzada en su casa, para evitar que funcionarios de la Policía Nacional, desaparecieran la prueba que permitía identificar el cuerpo de la víctima.

Una vez, a mi casa, llevé la cabeza de un cuerpo que correspondía a un joven universitario que había sido desaparecido, y que en dos ocasiones el cuerpo había aparecido, pero en esas mismas dos ocasiones, se lo robaban. En la tercera oportunidad no estaba dispuesto yo a que lo desaparecieran, y yo tenía que confirmar que sí se trataba de ese joven. La herramienta que teníamos era la carta dental. ¿Qué hice yo?, desprendí la cabeza del cadáver y me la llevé para mi casa. Para el día siguiente llevarla a mi laboratorio de la Fiscalía, y poderla examinar”, dijo el médico forense al espacio periodístico.

Manifestó que ese hecho puso en riesgo su matrimonio, pues la escalofriante escena fue descubierta por su esposa. “Esa historia no paró allí. Yo llevé esa cabeza en una caneca de pintura que teníamos a disposición, que me la conseguí en el lugar de los hechos, y al conductor le dije que en silencio la depositara en un área del apartamento donde vivíamos, donde nadie supiera.  La llenamos de papel periódico para evitar que el olor fuera mucho”.

“Pero teníamos un perrito, y el perrito tiene mejor olfato que cualquier humano, y el perrito empezó a molestar esa. Cuando mi esposa ve que el perro, le llama la atención esa caneca, y va a mirar, me dijo, o se va usted de la casa, o se va la cabeza. Obviamente, para contar esta historia tengo que decirles que se fue la cabeza”, puntualizó.

Quién es Carlos Eduardo Valdés Moreno

Esas son algunas de las confesiones que hizo en el espacio de entrevista que presenta el rol que desempeñan sus invitados de manera dinámica. Cabe recordar que Valdés completa 36 años como médico forense, más de tres décadas en las que se ha desempeñado en la Fiscalía General de Colombia.

En la parte de investigación de derechos humanos de la Procuraduría General de la Nación. Duró ocho años dirigiendo el Instituto Nacional de Medicina Legal y Ciencias Forenses de Colombia. Fue presidente de la Asociación Iberoamericana de Criminalística y Ciencias Forenses, que reúne las medicinas forenses de 21 países.

Ha sido consultor de la Fiscalía y de Medicina Legal de El Salvador, consultor para el programa de las Naciones Unidas del programa de lucha contra el crimen y la droga, y ha sido docente de diferentes universidades.

Ver el video de todas las cosas que se atreve a confesar décadas después, entre ellas, el día que unos insectos que llevó a su laboratorio se estaban comiendo los archivos de los casos emblemáticos de la Fiscalía General de la Nación, nunca confesó que él había sido el responsable.

Lee todas las noticias de nación hoy aquí.