El general retirado Henry Torres Escalante compareció este martes ante la Jurisdicción Especial para la Paz (JEP), y allí se comprometió a rendir cuentas ante el tribunal y a colaborar con el esclarecimiento de la verdad a favor de las víctimas.

“Yo no he causado ni ordenado ninguna de las muertes que se me atribuyen. Fueron cometidas por la Brigada que yo comandé sin que yo tuviera conocimiento de eso, pero igual quiero pedir perdón por esos hechos a las víctimas”, dijo Torres Escalante, declaración que recoge El Tiempo.

El general en retiro, que estuvo acompañado de su abogado Jaime Granados, dijo que pide perdón a las víctimas de estas masacres “con el compromiso de que esto jamás vuelva a suceder”.

También, Torres Escalante explicó que decidió acogerse a la JEP porque a su consideración “en la justicia ordinaria no hay las garantías necesarias para defender” sus derechos, escribió la JEP en un mensaje en su cuenta de Twitter en el que citó al oficial.

El tribunal, por su parte, explicó que será la Sala de Definición de Situaciones Jurídicas la que “estudiará y evaluará la competencia de la JEP y resolverá sobre la concesión de los beneficios previstos en la normatividad que la rige”.

Torres se encuentra privado de la libertad en la Escuela de Infantería del Cantón Norte desde 2016 por acusaciones de ‘falsos positivos’, y según dijo el abogado Granados ya radicó una solicitud de libertad condicionada.

“El general dijo que es un hecho cierto que hubo muertes y que deben responder quienes lo hicieron. El general es consciente de que las tropas bajo su mando cometieron los crímenes y por eso es su deber pedir perdón a las víctimas y contribuir a la verdad, pero eso no implica reconocer responsabilidad de lo que no es culpable”, sentenció Granados, según el diario capitalino.

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El general, quien fue comandante de la Brigada XVI del Ejército, está acusado de participar en casos de ‘falsos positivos’, como se conoce en Colombia al asesinato de civiles por parte de militares para presentarlos como guerrilleros muertos en combate, ocurridos entre diciembre de 2005 y julio de 2007.

Asimismo, se le señala de encubrir a varios oficiales a su cargo involucrados en esas ejecuciones extrajudiciales.

Torres Escalante se convirtió en el primer general en presentarse ante dicho organismo, que se creó tras la firma del acuerdo de paz en La Habana para juzgar los crímenes cometidos durante el conflicto armado.