Alberto Linero se inclinó por lo espiritual siendo muy joven. Esta vocación lo llevó a ejercer el sacerdocio durante gran parte de su vida (con gran reconocimiento a nivel nacional por sus dotes y manera de cautivar masas) hasta que en 2018 decidió colgar la sotana.
(Vea también: Alberto Linero dice por qué se arrepintió de tener hijos; alcanzó a hacerse exámenes)
Han pasado cinco años desde que el excura samario renunció al mandato que asegura Dios le dio y hoy su vida transcurre como la de cualquier mortal: reside en un apartamento, sale a la calle, parrandea, baila y hasta tiene pareja, actividades que durante el sacerdocio nunca o pocas veces experimentó.
Es por eso que a sus 54 años muchas de las cosas que trae la vida siguen siendo nuevas experiencias para él, ya que el sacerdocio obliga al celibato y a otras tantas cuestiones para el desempeño de sus funciones en la sociedad.
Alberto Linero dice que nunca ha ido a un motel
En una reciente conversación, la cual tuvo como tema principal los nuevos hoteles en el país que se pagarán por horas, a Linero le preguntaron sobre el tema y su respuesta sorprendió, tanto a los panelistas como a los oyentes de ‘Mañanas Blu’, programa matutino de la emisora Blu Radio.
“Esos se van a volver moteles”, opinó Linero sobre la nueva modalidad que implementó una aplicación para gestionar hoteles.
“Pero cómo sabe usted del tema hombre”, bromearon en la mesa los demás periodistas, encabezados por Néstor Morales.
Ante la pregunta embarazosa, Linero trató de zafarse advirtiendo que durante su etapa sacerdotal dio muchos consejos a los feligreses: “He confesado bastante, he escuchado bastante confesión y no doy malos consejos, te lo aseguro”.
“¿Alguno está libre de haber moteleado?”, preguntó Néstor Morales y todos reconocieron con un “no” el ‘pecado’. No obstante, Linero, sereno y tranquilo, muy a su estilo, se confesó sin titubeos.
“No, no tuve tiempo de entrar a un motel”, sentenció el exsacerdote, hincha número uno del Unión Magdalena.
Y agregó: “Si hubiera ido a un motel, lo habría reconocido. Se lo propondré a Alcira, mi esposa”.
Cabe recordar que Albero Linero, tiempo después de dejar la sotana inició una relación sentimental con María Alcira Batista, de 44 años de edad (10 años menor que el samario).
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