La carrera se realiza en medio de las montañas en la frontera entre California y Nevada y también tiene etapas de ultramaratón de 50 millas (81 km) y 55 km. La TRT es una de las competencias más apetecidas por los corredores de larga distancia, por los desniveles que presenta, la selección de los corredores que asisten y, finalmente, por la duración de la misma.

“Tahoe Rim Trail es una carrera lindísima, donde siempre estas subiendo o bajando. Era un reto personal acabarla. Más que pierna y resistencia, es una carrera para la cabeza, donde al final se aprende mucho y se disfruta de romper sus propios récords. Hay que prepararla muy bien, tanto en lo físico y mental, como en lo alimenticio”, señaló el colombiano.

A sus 53 años, el también entrenador ha sido ciclista, tenista, triatleta, corredor de aventura y, desde 2001, corredor de Trail Running, Calle y Ultradistancia. Actualmente es asesor de atletas amateurs como Nicolás Santos, quien ocupó el tercer lugar en las 50 millas y fue el mejor colombiano en la maratón de Nueva York del año 2016, y María Juliana Pérez, quien ocupó el sexto lugar en las 50 millas.

Rodríguez logró realizar la exigente carrera en un tiempo de 30 horas, 47 minutos y 32 segundos, lo cual lo ubicó en el puesto 70 en la general, entre cerca de 210 atletas, de los cuales solo 143 lograron acabarla. Así mismo, en su categoría de mayores de 50 años, se ubicó en el puesto número 10.

“El primer ‘loop’ lo terminé fuerte y me sentí bien (13 horas y 15 minutos), tenía pocas molestias y venía muy enfocado y motivado para el segundo ‘loop’. Sin embargo, a esta altura todo empieza a cambiar, las molestias y los dolores no me dejaban tomar el ritmo que quería. En el kilómetro 145 y con las ganas de terminar, todo cambio: los dolores y las molestias quedaron atrás y literalmente volé a la meta, fueron 10 kilómetros bajando, pero los disfruté muchísimo”, resumió Rodríguez.

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La carrera tuvo una longitud de 100 millas (162.5km), cercano a la distancia que hay entre Bogotá e Ibagué, y se divide en dos vueltas o ‘loops’ (de 81.2 km cada una), en un circuito de montaña a una altura promedio de 2.400 metros, en la cual se acumulan cerca de 15.000 metros totales de desnivel. En ese sentido, el TRT es casi el equivalente a correr 4 maratones seguidas.

“A 2 kilómetros de la llegada, me caí sin mayores consecuencias. Fue muy emocionante sentir el ánimo de la gente y, reencontrarme con mis compañeros de viaje. Viví altos y bajos importantes, pero nunca se me pasó por la mente algo diferente a terminar y conseguir el objetivo, para reclamar el buckle de las 100 millas de Lake Tahoe. Estoy feliz y agradecido”, finalizó Rodríguez.