En entrevista con 'La Red', el actor aseguró que su mamá —sobreviviente de cáncer— empezó a sentirse "maluca" en marzo pasado y, al ver que no mejoraba, llamaron al médico.

Álex señaló que "la señora" que atendió a su mamá descartó el coronavirus "a ojo" y dijo que ella solo tenía secuelas de enfermedades preexistentes. El famoso añadió que la salud de su madre empeoró, así que volvieron a llamar a los médicos, quienes, una vez más, indicaron que no se trataba de coronavirus sino de una "neumonía infecciosa".

De acuerdo con el relato del actor, el pasado 27 de marzo, su mamá fue trasladada en ambulancia a una clínica de Bogotá, donde los médicos la atendieron "como si fuese el día número uno de sospecha de contagio de coronavirus".

En la noche de ese mismo día, los doctores intubaron a la mujer y le hicieron la prueba de coronavirus; sin embargo, esta era la "de más alto de índice de probabilidades de error", por lo que el resultado no revelaría la verdad de la condición de la paciente, señaló Álex en el espacio de farándula.

Según el artista, su mamá permaneció 8 días en observación hasta que finalmente falleció, por lo que debían preparar su cremación:

"La funeraria es pague el servicio de incineración y ya está. Ni siquiera me dejaron ver a mi mamá, no me dejaron en ningún momento despedirme. La trataron como si fuera un residuo radioactivo, la envolvieron en chuspas y me la incineraron así; eso ha sido un golpe muy doloroso".

El actor indicó que el resultado de una segunda prueba de coronavirus reveló el diagnóstico verdadero de su mamá, pero el resultado llegó 5 días después de que ella falleciera.

"Sin duda alguna, mi mamá estaría aquí con nosotros si la atención hubiese sido profunda, si la hubieran atendido como si fuese el pico, se salvaba, [pero] no, la atendieron como si fuese el inicio [de la enfermedad]", concluyó.