No hay nada más placentero que tomar una buena ducha, bien sea para comenzar el día o para relajar nuestro cuerpo luego de un largo día laboral.

Sin embargo, existen algunos errores que aunque parezcan insignificantes, pueden restar vitalidad a nuestra piel.

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Partes del cuerpo que se deben limpiar bien

Perseverar por mantener una buena salud no solo implica visitar al médico para un control rutinario, o tomarse los medicamentos que él indica para el tratamiento de determinadas enfermedades o afecciones.

Normalmente, el bienestar de una persona también se asocia con una nutrición equilibrada, la práctica de ejercicios o actividades deportivas, un descanso nocturno suficiente y reparador, y no fumar ni consumir alcohol u otras sustancias psicoactivas.

El empleo constante de medidas de aseo personal, permiten prevenir la circulación y expansión de gérmenes que conviven a diario con el ser humano.

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Genitales

De acuerdo con Webwebconsultas la ducha diaria en los hombres “han de enjabonarse con cuidado, pues la piel es más fina en esa zona. Es importante enseñar a los niños a lavarse bien esa zona si no se les ha realizado la circuncisión”.

En las mujeres, desde niñas es aconsejable “el uso de jabones específicos para evitar irritaciones y sequedad, pues en esa zona tienen un PH distinto al resto del cuerpo. Hay que finalizar secando muy bien y con cuidado los genitales y la zona de la ingle para evitar la humedad y la formación de hongos”.

Codos y rodillas

Son zonas rugosas y propensas a la sequedad y la hiperpigmentación. “Es importante lavarlas a diario y, si se oscurecen, frotarlas bien con una esponja. Tras el baño hay que hidratarlas con un aceite vegetal para que no aparezcan ásperas y descamadas”.

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Pies

Deben lavarse diariamente, pues “poseen un gran número de glándulas de sudor y durante el día se acumulan las secreciones que producen mal olor y que, si no se eliminan, acaban derivando en infecciones y grietas. En los meses de verano, el calzado abierto aumenta el riesgo de suciedad y de contagio durante las actividades al aire libre. Es importante secar detalladamente los espacios interdigitales y cortar las uñas tras una ducha caliente, mientras están blandas, ya que así resultará más fácil”.

Cabello

Se lava, la mayoría de las veces, aprovechando la ducha diaria. “El cuidado del pelo depende de su calidad y tipo, que varía en cada etapa de la vida. En los bebés se suele realizar un lavado diario durante el baño, con productos que respetan su fragilidad. El cabello de los niños va engrosando a medida que crecen, aunque todavía no es el que tendrán en su etapa adulta. No es necesario lavarlo a diario, pues el secado frecuente con aire caliente, sobre todo en niñas cuando lo llevan largo, puede ser muy agresivo”.