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Las autoridades en el municipio de Venadillo, en el norte del Tolima, se vieron sorprendidas por un hecho insólito que dejó a muchos consternados. Una mujer de 61 años de edad fue detenida en el preciso momento en que intentaba ingresar sustancias estupefacientes a su hijo, quien se encuentra detenido en la estación de Policía local.
Lo que inicialmente parecía ser un acto de amor y preocupación maternal, se transformó en un lamentable acto delictivo. La mujer pretendía llevar alimentos a su hijo, pero en medio de una requisa de rutina, las autoridades descubrieron un oscuro secreto.
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La sorpresita que le llevaba
Escondidas en un portacomidas, hallaron 27 envolturas en papel con un igual número de dosis de cocaína, así como 30 dosis de marihuana ocultas en la tapa de un termo.
El comandante de la Policía del Tolima, Coronel Rodolfo Carrero, reaccionó con indignación ante este hecho, calificándolo de inoportuno y aberrante. “Los padres incentivando el consumo de estupefacientes, esto no puede seguir así, nosotros como padres de familia debemos trabajar con las autoridades y no permitir que el flagelo de la droga, que es un cáncer, siga corrompiendo a la sociedad”, afirmó el oficial.
La mujer y el material incautado fueron puestos a disposición de la Fiscalía 51 local de Armero-Guayabal, enfrentando cargos por el delito de tráfico, fabricación o porte de estupefacientes.
Esta sorprendente detención ha despertado un debate sobre la importancia de la prevención y la lucha contra el consumo de sustancias psicoactivas, subrayando la responsabilidad que los padres tienen en la educación y el bienestar de sus hijos.
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