La nueva víctima de la COVID-19 es Marilyn Pérez, una profesional de la salud que falleció el pasado lunes en la clínica El Prado, con comorbilidad de diabetes. No obstante, su familia no encuentra el cuerpo y cree que se lo entregaron a las personas equivocadas, informó Zona Cero.

El esposo de Pérez, Alberto Hernández, contó en el medio local que como no le daban razón del cadáver de su ser querido se fue para la morgue a verificar, y que de allí lo enviaron a la morgue de la UCI, a donde decidió ingresar para corroborar por sus propios medios.

Pero el hombre optó por fotografiar los cadáveres de dos hombres que estaban allí, a los que el medio identifica como Orlando Carrillo y Javier García, y gracias a que una de las víctimas era conocida de su familia una hermana de Hernández decidió ponerse en contacto con los dolientes.

“Ella le preguntó a una hija (de Carrillo) que si lo habían enterrado. Le dijeron: ‘sí, lo enterramos esta mañana’. Y resulta que se le entregó la foto. Y le dice: ‘mira a tu papá, todavía está en la morgue de la clínica“, contó el hombre en Zona Cero.

“Lo ingresamos por COVID, o se lo lleva”; médicos niegan atención a paciente sin el virus.

Artículo relacionado

“Colapsó la red sur; es increíble”: médico alerta sobre la realidad de las UCI en Bogotá

El mismo procedimiento se hizo con los familiares de García, y una sobrina del hombre lo reconoció en la fotografía. “Bueno, tu tío todavía está aquí en la morgue de la clínica. A quien enterraron esta mañana fue a mi mamá. Así que vayan a reclamar a su tío”, le dijo una hija de la enfermera.

En entrevista con Blu Radio Katerin, hija de la profesional de la salud que falleció, dijo que todavía no hay claridad de a qué familia le entregaron el cuerpo, y que la respuesta de la clínica no fue la más indicada: “Que no nos preocupáramos, que ella ya estaba sepultada. Eso nos dio mucha rabia porque todo el mundo tiene derecho a llorar sus muertos”, dijo.

El mismo drama lo viven los dolientes de Carrillo, pues según relató en la emisora Paula Restrepo, al parecer lloraron y sepultaron el cuerpo equivocado.

“Nosotros realizamos el sepelio y después nos enteramos de que no era mi suegro el que nos habían entregado sino que el cuerpo de él continuaba en la morgue. Parece que nosotros le dimos sepultura a la señora”, comentó la mujer.

Este caso se suma al de la familia León Ahumana, también en Barranquilla, que el pasado 23 de junio denunció la pérdida del cuerpo de la abuela, en la Clínica Murillo.

Alcaldesa Claudia López

Artículo relacionado

Baja para C. López por el coronavirus: funcionaria cercana a ella está contagiada

Debido a las quejas por el presunto mal manejo que se les está dando a los cuerpos por parte de clínicas y funerarias, la Secretaría de Salud de Barranquilla dio inicio a acciones de control para vigilar estos procedimientos.