Pero ese es apenas el guante de seda con que recibe Thomas en su columna de El Tiempo a Sánchez Cristo, porque después su amonestación inicial va subiendo de tono.

Le critica al director de la emisora, por ejemplo, que caiga en el lugar común de decir que “el día de la mujer debe ser todos los días del año”, y extiende el reproche a los demás integrantes del equipo periodístico de W Radio.

“Ninguna periodista de la mesa o de las corresponsalías replicó [lo que dijo Sánchez Cristo]. Tampoco se inmutaron los Calvás, ni los Palacios ni el mismo Félix de Bedout. ¡Cómo me hace de falta Camila Zuluaga en el dial de La W!”, escribe Thomas.

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Unas pocas líneas más abajo, la reconocida feminista le da al periodista algunos de los “cientos de argumentos” para celebrar el Día de la Mujer: “El 8 de marzo se suelen recordar las cifras de feminicidios (alrededor de mil anuales en nuestro país); se suelen exponer las cifras de inequidades en los salarios de hombres y mujeres, que siguen siendo vergonzosas; el reconocimiento del trabajo no remunerado de las mujeres, que los y las economistas cifran en un 20 por ciento del PIB; la tasa desempleo de las mujeres, que sigue siendo casi el doble de la de los hombres, y […] la lamentable subrepresentación de las mujeres en el Congreso”.

Después, Thomas saca a relucir el estrato de Sánchez Cristo. “¿Sabes, Julio? De hecho, suelo encontrar mucha más incomprensión frente a esta jornada entre mujeres y hombres de tu estrato. Es decir, con las mujeres de sectores populares no hay mucho que explicar: ellas saben que más derechos les significan más vida, y por eso entienden el significado de un día como el 8 de marzo. En cambio, cuando me encuentro con las ejecutivas, suelen tener las mismas preguntas que tuviste al aire”.

Y da las razones por las que ella cree que personas del estrato de Sánchez Cristo no entienden muy bien el propósito de la celebración. “Tienen todo resuelto y no quieren saber lo que sucede afuera de su pequeña burbuja”, dice Thomas, y además advierte que muchas de las mujeres de ese nivel “también son víctimas del poder patriarcal”.

Al terminar, la coordinadora del grupo Mujer y Sociedad parece no tener ya un guante de seda en el trato con el periodista, sino una verdadera manopla: “Una pregunta como la tuya en Francia o Alemania te causaría muchos problemas. No es una cuestión de corrección política, sino de mera ilustración. Y tú de bobo y poco informado, creo que no tienes nada. Y, por favor, nada de flores y mariachis. Hechos para la memoria”.