No hay dinero que alcance para saciar la necesidad de plata de los dirigentes de la Dimayor

Según dice Iván Mejía en su columna este domingo en El Espectador, esa institución quiere lanzar el nuevo canal “Premium”, que presentaría los clásicos del futbol colombiano, porque los 75 mil millones de pesos que pagan los canales Win Sports y RCN no son suficientes para los dirigentes del fútbol colombiano, y quieren más dinero para despilfarrar en malas contrataciones. El periodista deportivo explica que el nivel del espectáculo no justifica nuevos cobros de derechos de televisión:

“Tienen los bancos técnicos llenos de extranjeros troncos que contrataron alegremente y que no sirven ni para suplentes. No han mejorado en nada la calidad del espectáculo como tal, estadios sucios, carentes de seguridad, malas canchas, pésimas iluminaciones, pero viven quejándose y llorando cuando han demostrado ser pésimos administradores”.

Las cuentas de las Farc no le cuadran a nadie

el columnista de El Tiempo, Mauricio Vargas, no es la excepción a la regla. El inventario de bienes y activos que presentó el desmovilizado grupo guerrillero ante el Ministerio del Interior no lo convenció para nada. Según Vargas, el dinero en efectivo que dicen tener es el mismo que las autoridades suelen encontrar en una sola caleta. Además, afirma que el hecho de hayan incluido traperos, escobas, pocillos, entre otras cosas por el estilo, se trata de un irrespeto a las víctimas y  un “mal chiste”, pero ese no es el único:

“El vocero de las Farc, ‘Pastor Alape’, sostiene que el listado equivale a 963.000 millones de pesos. Aun si esa cifra fuera correcta, es muy inferior a lo que la Fiscalía ya ha identificado y comenzado a intervenir por vía judicial. La información que tiene apunta a una cantidad no lejana a los 9 billones de pesos, casi diez veces lo que dice ‘Alape’, quien, por cierto, en otro mal chiste, dijo hace pocos días que “las Farc no cometieron masacres””, escribió.

 “Que a los corruptos los cuelguen de las huevas y los maten”

Felipe Zuleta, al igual que miles de colombianos, está harto del nivel insospechado de la corrupción en Colombia y hace una sugerencia especial en su columna de este domingo en El Espectador:

“…yo colgaría de las huevas en la plaza de Bolívar a los corruptos. Sí, y que los mate el Estado por corruptos”.

Pero antes de eso justifica su posición:

“Qué vergüenza, pero sobre todo qué rabia que usted y yo trabajemos como mulas para sobrevivir y, simultáneamente, paguemos altísimos impuestos y cargas contributivas para que esos recursos acaben en las manos de esos repugnantes, roñosos, y vomitivos corruptos”.

Solo falta que a guerrilleros les pidan declaración de renta

Para Ramiro Bejarano, el llamado risible que hizo el fiscal Néstor Humberto Martínez –de quien sugiere que se metió al bolsillo a la prensa– sobre el inventario de bienes de las Farc, era de esperarse por su oposición al proceso de paz y porque no corresponde a la calidad de  “poseedores y ocupantes” de los guerrilleros y no como propietarios, dice en su columna de El Espectador.

“Lo único que le falta a este dislate es exigir que los exguerrilleros presenten sus declaraciones de renta. El fiscal tiene que confiar en que el Gobierno, a través de varias entidades, será capaz de establecer los datos de los inmuebles inventariados que ningún guerrillero tiene en su poder”.

Ya que las Farc dejaron las armas, que dejen también la arrogancia y el sectarismo

El editorial de este domingo de El Espectador hace una reflexión sobre cómo debería ser la inserción de las Farc en la esfera política y de cómo los colombianos debe estar listos para aceptar la pluralidad sin odio ni violencia.

“Esa idea es esencial para enfrentar la hostilidad inevitable que le espera a su participación en política. Dentro del pesado equipaje que cargan las Farc en el momento de arrancar su vida como partido, uno del que pueden deshacerse con un sencillo cambio en su actitud es el de la arrogancia y el sectarismo que demostraron durante las negociaciones o durante la campaña del plebiscito. Le harían muy bien al país si comprendieran las razones por las que tantos colombianos votaron No aquel domingo de octubre”.

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La prepotencia de las Farc le pasará factura en el escrutinio político

La posición del editorial de El Tiempo coincide con El Espectador en el sentido de que a la desmovilizada guerrilla le falta tacto, sentido humano y sensibilidad en su estreno como organización política. Sobre todo cuando el país recibió mal el listado de bienes que presentó con fines de reparación a las víctimas.

“Lo ocurrido preocupa también porque si algo es fundamental para el éxito de la implementación de los acuerdos, es no solo que ambas partes demuestren total seriedad y disposición a cumplir con lo firmado, sino que en ningún momento olviden a quienes están en el centro de este esfuerzo colectivo”.