Firth, estudiante de derecho y ahora con 18 años, reveló al diario Mirror que ha dormido la mitad de todas las navidades desde que fue diagnosticada con esa rara enfermedad.

El síndrome de Kleine-Levin es “un trastorno neurológico complejo que involucra períodos recurrentes de sueño excesivo, comportamiento alterado y una comprensión reducida del mundo”, relata el rotativo británico.

Megan vive con su papá, su mamá y un hermano de 13 años. Para todos ellos es muy difícil conllevar esta situación, pues han llegado a verla postrada en la cama por días y solo despertarse para comer algo y usar el baño, explica Mirror.

Firth, que cumple su primer año en la Universidad de Nottingham, dialogó con el rotativo inglés al cual explicó que cuando más sufre es en los meses de invierno: “Esto significa que a menudo estoy dormido durante la Navidad”.

“Siempre estamos en casa y mis abuelas tienden a venir y quedarse con nosotros. Pero incluso si estoy en medio de un episodio de sueño, al menos me gusta estar cerca de todos y dormir abajo en el sofá”, relata.

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Hace 5 años, Firth tuvo una fuerte gripa, lo que le provocó una fatiga extrema y una niebla mental que no le permitió distinguir la diferencia entre los sueños y la realidad. Después de una semana con la gripa y dormir todo el día, sus padres la llevaron al hospital John Radcliffe en Oxford, indica Mirror.

Pero en ese momento los estudios para comprobar si tenía el síndrome de Kleine-Levin salieron negativos, “debido a que la somnolencia fue más probable debido a una cepa particularmente virulenta de la gripa”, explica el rotativo británico.

Fue un mes después, durante un viaje a Australia, que la inesperada sensación de dormir a toda hora le regresó y el diagnóstico fue confirmado por los médicos en el Hospital John Radcliffe, quienes dijeron que nunca antes se habían encontrado con esta condición que, según una revisión publicada por la Fundación del Síndrome de Kleine-Levin, afecta a solo una persona por millón, relata Mirror.

“No importa cuánto tiempo dormía, aún me sentía cansada cuando me despertaba, como si hubiera estado dormida solo durante media hora, cuando en realidad había estado en cama durante 12 horas“, cuenta Megan.