“Se originó una riña en horas de la madrugada y una de las personas involucradas en la riña lanzó un artificio lacrimógeno que originó la estampida de más de 500 personas que se encontraban en el club social (…), ocasionando el fallecimiento de 17 personas”, declaró Reverol a la televisión estatal VTV.

El funcionario anunció la detención de 7 personas por el caso, dos menores, uno de ellos el presunto responsable de activar la bomba de gas.

La encargada del establecimiento también fue arrestada por el incumplimiento de “las medidas que se deben adoptar (…) para evitar el ingreso de armas de fuego y municiones” a lugares públicos, agregó Reverol.

Las muertes se debieron a asfixia y politraumatismos, según los informes oficiales. Los heridos son atendidos en el Hospital Pérez Carreño.

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El periodista Román Camacho, citado por El Nacional, corroboró la versión del ministro: “Se formó una discusión entre 2 personas y uno de los asistentes al club accionó una bomba lacrimógena dentro del sitio”.

El diario reporta que otras víctimas mortales se produjeron por asfixia y 5 heridos fueron trasladados al hospital.

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