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En Colombia, la búsqueda, valoración y selección de los mejores perfiles laborales (a los que aplican directivos con las ‘hojas de vida más pro’) cada vez exige habilidades duras o más específicas para esos cargos, que pagan muchísimo dinero, pero también se les pide habilidades blandas, las cuales cada uno puede trabajar de manera permanente y que de seguro le ayudarán en ese objetivo para dejar de cometer errores y así evitar rechazos.
Para este tipo de posiciones son necesarias competencias duras, que son las que se aprenden en estudios a lo largo de la vida (colegio, pregrado, posgrado) e incluyen también conocimiento de idiomas o programas que ofrecen habilidades digitales.
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Pero también existen competencias blandas que son un plus entre un grupo final de candidatos que se presenta a una compañía y que marca la diferencia, incluso más que las habilidades más duras.
Entre las competencias blandas más importantes se encuentran trabajo en equipo, liderazgo, toma de decisiones, planificación, comunicación asertiva e influencia, capacidad de negociación, visión estratégica, innovación y creatividad, polivalencia y tolerancia a la presión.
“Estas habilidades, en conjunto, demuestran la capacidad de los candidatos que aspiran a cargos de alta y media gerencia para sacar grandes equipos adelante y engranar piezas, de forma que aumente la productividad de la compañía bajo su gestión”, afirmó Juan Camilo Escovar, experto en reclutamiento directivo.
En un mercado laboral cada vez más competitivo, las habilidades blandas son una ventaja comparativa entre candidatos finales a una posición por su factor diferenciador, que exige ver más allá de lo común y de las tendencias lógicas del mercado.
Este tipo de competencias también requiere una alta exigencia de buenas relaciones interpersonales por la constante movilidad y nuevo trato de personas a la que están predispuestos ejecutivos en posiciones directivas en eventos como reuniones o juntas empresariales.
En este sentido, la búsqueda-valoración y selección es cada vez más precisa por parte de las firmas cazatalentos pues requiere filtros para hallar a la persona idónea con las óptimas competencias posibles.
Además, es necesario contar con perfiles adecuados para cada ambiente y cultura organizacional, ya que no es lo mismo postular a una compañía familiar que a una multinacional.
Así mismo, las competencias blandas prevalecen, de acuerdo con Forbes, pues tras el impacto del Covid-19 se convirtieron en el potencial más valioso que necesitan las empresas en el siglo XXI a nivel global, pues impulsan la capacidad de gestión y confianza en los grupos laborales, en caso tal de ser bien empleadas por líderes que jalonen el rendimiento profesional y competitivo.
1. Trabajo en equipo
Aceptar la diversidad y tener actitud positiva al trabajo en grupo.
2. Habilidades de comunicación
Comunicar efectivamente de forma oral y escrita diversas situaciones.
3. Conocimiento teórico práctico
Capacitación permanente y actualización de estudios de alto nivel.
4. Toma de decisiones
Tomar prioridades y buscar soluciones efectivas.
5. Procesamiento de información
Comprensión de ideas de forma rápida y concisa.
6. Uso de programas informáticos
Habilidades digitales acordes a la prosición de la empresa.
7. Planificación
Capacidad de jerarquizar y hacer previsiones reales.
8. Análisis de datos
Extracción de conclusiones a partir de información para asociar ideas.
9. Idiomas
Ofrecen apertura de nuevos campos y relacionamiento con clientes.
10. Habilidades gerenciales
Son la clave para la administración y concretar negocios de manera efectiva.
Hasta 30 % puede ganar más una persona con programas de formación adicionales a su conocimiento.
Una de las tareas más complejas en ocasiones es encontrar un empleo formal que ayude a tener una estabilidad económica.
Ahora existen muchas plataformas, páginas web y redes sociales que permiten a una persona buscar un empleo con base en la profesión y experiencia, con una gran variedad de ofertas que se ajustan a los diferentes perfiles.
Sin embargo, hay casos en los que ofertas de empleo falsas circulan por los diferentes canales digitales o correo electrónico, en las que prometen grandes cantidades de dinero por ejecutar tareas mínimas.
En esos casos, es importante que aprenda a identificar si una oferta de empleo es falsa y solo busca aprovecharse de la persona, haciéndole perder tiempo y que incluso pueda resultar estafado.
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