La Policía de la Ciudad de Buenos Aires lo detuvo este martes y fue imputado por los delitos de daño agravado en el marco de un espectáculo deportivo, impedir la realización de un espectáculo deportivo de carácter masivo con concurrencia pública y promover la formación de grupos destinados a cometer delitos, entre otros.
“Los investigadores tuvieron que probar con diferentes fotos obtenidas de las redes sociales que muestran los cambios físicos del imputado durante los meses precedentes al pasado 24 de noviembre”, día en que se registró la agresión al plantel de Boca Juniors, explicó el Ministerio Público Fiscal de Buenos Aires en un comunicado.
Firpo fue identificado tras un análisis de las distintas imágenes grabadas de los hechos. La imagen del momento en el que ingresó al Monumental. Habría sido clave para su reconocimiento.
Firpo es mecánico, tiene 31 años, es socio de River Plate, y el club ya decidió su expulsión. Este miércoles será presentado ante la fiscal Adriana Bellavigna.
Inicialmente se expone a una pena de 2 a 6 años de prisión por los delitos de daño agravado, lesiones dolosas y otras infracciones encuadradas en la Ley de Espectáculos Deportivos ya mencionadas, el secretario de Seguridad de Buenos Aires, Marcelo D’Alessandro, le dijo a Clarín que quieren “caerle con todo el peso de la ley”, y por eso el Gobierno piensa tipificar la imputación como “tentativa de homicidio”, con lo que tendría una condena mayor.
Las fuentes del gobierno del diario también le dijeron:
“No puede ser que este tipo lance una piedra, rompa un micro, se cargue un ministro, deje a la Argentina sin su partido más trascendental y salga caminando por la calle lo más campante”.
Entre tanto, hay otros cuatro individuos que ya fueron identificados por las autoridades argentinas, opero adelantaron la captura de Firpo porque consideraron que por su cambio de fisionomía “había posibilidades de fuga”.
Las autoridades también indicaron que como Firpo no tiene redes sociales, tuvieron que investigar a sus amigos para cotejar las fotos de su apariencia.
Contexto
El encuentro de vuelta de la final de la Copa Libertadores, que había sido programado para el sábado 24 de noviembre, se pospuso porque hinchas de River Plate lanzaron piedras y botellas al autobús que transportaba a los jugadores de Boca al estadio Monumental e hirieron a algunos de ellos.
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La Confederación Sudamericana de Fútbol decidió entonces que la final se disputara “fuera de territorio argentino”, en Madrid, este domingo 9 de diciembre, al no cumplirse las condiciones de seguridad para jugarse en Argentina.
El Gobierno de Argentina y el de Buenos Aires apuntan a que el ataque fue organizado por los barras bravas de River y que tuvieron relación con la incautación, el día anterior, de 300 entradas para el encuentro y 7 millones de pesos (unos 180.000 dólares) en registros que incluyeron el domicilio de uno de sus líderes, Héctor ‘Caverna’ Godoy.
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