Bogotá
Violenta pelea entre conductores en plena NQS, en Bogotá: palos, cara llena de sangre y más
Tú navegador no es compatible para reproducir este audio
El escritor colombiano revela el dolor y la responsabilidad detrás de su nuevo libro.
El escritor colombiano Héctor Abad Faciolince habló sobre su más reciente libro, ‘Ahora y en la hora’, y sobre su ya clásico ‘El olvido que seremos’, en una entrevista para ‘Leer es bacano‘. La conversación giró en torno a los orígenes y las motivaciones de ‘Ahora y en la hora’, obra marcada por el viaje que Abad realizó a Ucrania en plena guerra y por su experiencia cercana a la muerte en la región del Donbás.
(Vea también: Entre humor y tragedia: la mirada única de Antonio García Ángel en su nueva novela ‘Que pase lo peor’)
Allí compartió momentos con la periodista ucraniana Victoria Amelina, asesinada en un bombardeo, un hecho que lo impulsó a narrar con detalle y crudeza lo vivido: “Soy cobarde para casi todo, pero para escribir no soy cobarde”, dijo el autor, quien asumió la escritura del libro como un acto de valentía y de responsabilidad moral.
En el diálogo también hubo espacio para repasar el impacto de su libro ‘El olvido que seremos’. Abad recordó que lo concibió como un libro privado para sus hijos, pero terminó convertido en una obra fundamental de la literatura colombiana contemporánea y en un símbolo de memoria frente a la violencia que marcó al país con el asesinato de su padre, el médico y defensor de derechos humanos Héctor Abad Gómez.
La entrevista dejó además reflexiones sobre el poder de la lectura como refugio y herramienta de transformación. “Leer es bacano porque uno se ríe, se conmueve, llora y sale distinto de la lectura”, afirmó el escritor, subrayando que la lectura debe ser accesible y no una práctica elitista.
Con esta conversación, ‘Leer es bacano’ ratifica su propósito de tender puentes entre escritores y lectores, mostrando que detrás de cada libro hay experiencias vitales y miradas que iluminan la realidad. La voz de Héctor Abad, entre la memoria íntima y la denuncia pública, deja en claro que la literatura sigue siendo una herramienta fundamental para comprendernos como sociedad y para no olvidar.
Sigue leyendo