La Esmeralda hace historia: primer ecobarrio certificado en Bogotá revoluciona la sostenibilidad urbana

El barrio La Esmeralda se erige como protagonista de la transformación ambiental en la ciudad, tras convertirse en el primer ecobarrio certificado por el programa Bogotá Construcción Sostenible, liderado por la Secretaría Distrital de Ambiente de Bogotá (SDA). La obtención del nivel avanzado, enmarcada en la Resolución 754 de 2025, consagra a La Esmeralda como modelo en la categoría Ecobarrio, reconocimiento entregado por su destacado puntaje y gestión ambiental innovadora. Este hito es la culminación de un proceso colectivo orientado al aprovechamiento responsable de los recursos y a la consolidación de prácticas sostenibles a nivel barrial, con el fin de estrechar el vínculo entre las comunidades y su entorno urbano.

El enfoque del programa Ecobarrios busca fortalecer la gestión ambiental desde iniciativas y acciones situadas en el territorio. Según Adriana Soto, secretaria distrital de ambiente, la certificación de La Esmeralda demuestra la participación activa de las comunidades como agentes fundamentales en la resiliencia climática de la capital. Elementos técnicos como la instalación de sistemas urbanos de drenaje sostenible (SUDS), con 17 metros cuadrados destinados a la recolección y filtración de aguas lluvias para el riego comunitario, y la implementación de paneles solares que han logrado reducir el consumo de gas natural en un 50%, son apenas una muestra de cómo la tecnología y el compromiso vecinal pueden fusionarse a favor de la sostenibilidad urbana.

La gestión integral del agua y la energía son ejes centrales. El barrio administra 2.180,5 litros de agua lluvia para huertas comunitarias de 132 metros cuadrados. El entorno urbano se ha revitalizado con 398,04 metros cuadrados de infraestructura verde, que integra jardines verticales, techos verdes y mobiliario urbano ecológico. A esto se suman 660 metros cuadrados de jardines verticales privados y 650 metros cuadrados de jardinería pública convencional, donde se promueve el uso de fuentes hídricas alternativas y la bioretención, respaldada por la siembra de 142 árboles durante 2024.

La estructura organizativa consolidada por la Junta de Acción Comunal (JAC) y el trabajo comunitario han sido la base del éxito, al integrar procesos ambientales, sociales, culturales y de emprendimiento. Además, se han adoptado tecnologías sostenibles: paneles solares en zonas comunales y residencias, puntos de carga para vehículos eléctricos, compostaje comunitario y puntos limpios para residuos especiales, todo acompañado por campañas de sensibilización y monitoreo ciudadano de la calidad del aire.

La política pública de Ecobarrios, impulsada desde 2014 por la Secretaría del Hábitat, promueve el desarrollo urbano sostenible mediante la colaboración entre entidades distritales y ciudadanía. Se fundamenta en la participación de los habitantes en el diseño e implementación de infraestructuras ecológicas, que minimizan el impacto ambiental y fortalecen los vínculos vecinales. El programa, integrado en la estrategia ‘Bogotá, mi Ciudad, mi Casa’, amplía así el impacto de Bogotá Construcción Sostenible, consolidando espacios urbanos resilientes, eficientes y representativos de una transformación social y ambiental bottom-up.

¿Qué implica un Sistema Urbano de Drenaje Sostenible (SUDS) para un barrio?

Uno de los pilares de la estrategia de Ecobarrios es precisamente el uso de Sistemas Urbanos de Drenaje Sostenible, conocidos como SUDS. Estos sistemas permiten captar, almacenar y aprovechar el agua de lluvia directamente en el mismo sector donde se recoge, evitando así la sobrecarga de los sistemas convencionales de alcantarillado y reduciendo inundaciones. En el caso de La Esmeralda, los SUDS no solo gestionan el agua para huertas y zonas verdes, sino que impulsan una cultura de manejo responsable del recurso hídrico y fortalecen la infraestructura ecológica socializada, ejemplificando una alternativa innovadora para la adaptación urbana al cambio climático.