El abogado destaca la voz de protesta que sentaron varios congresistas contra el uribismo en el Congreso y, aunque nadie sabe en qué terminará, los invita a no desfallecer.
En su habitual columna de El Espectador, Bejarano analiza algunos de los ministros nombrados por Iván Duque y calcula que se viene “más persecución” en el país.
De Guillermo Botero resalta “su visceral odio por (el presidente Juan Manuel) Santos” y lo califica de “deslenguado” luego de su propuesta de regular las protestas sociales.
“Parecía imposible nombrar a alguien en el Ministerio de Defensa más torpe con sus declaraciones que Luis Carlos Villegas, pero lo lograron”.
De Nancy Patricia Gutiérrez, el columnista recuerda “su talante perseguidor” y teme que pueda ‘hacer y deshacer’ en el Ministerio del Interior.
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En cuanto a Gloría María Borrero, Bejarano presume que “desde su nuevo cargo concretará la odiosa injerencia en la Rama Judicial, como lo hizo recientemente con la JEP mediante una insólita carta concebida para proteger intereses de terceros empresarios”.
El escritor también critica, sin mencionarlo con nombre propio, a Abelardo De la Espriella, por los gritos, insultos y amenazas que profirió en W Radio durante la semana, y lo encasilla entre los “iracundos y altaneros partidarios” del nuevo mandatario, sobre el que concluye:
“Duque se comporta como si en las pasadas elecciones los 19 millones de colombianos que sufragaron hubieran votado todos en su favor. Para él y su séquito de furiosos halcones no existen los 8 millones de personas que votaron por Petro, ni los que lo hicieron en blanco”.
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