García y su esposo Cipriani, reconocidos empresarios de esa industria en Colombia, dijeron en una entrevista con Cívico que las capitalinas son mujeres seguras y de mente abierta por lo que no se limitan a la hora de actuar en las películas triple X.

No lo entendieron y se prestó para malas interpretaciones

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Incluso, se atreven a afirmar que las bogotanas son las mejores de la industria en América Latina porque actúan para cumplir sus fantasías y no necesariamente por dinero.

Estas fueron sus palabras a Cívico:

Las mujeres (de Bogotá) ven la sexualidad muy normal. Sus motivaciones no son volverse millonarias, sino lograr sus fantasías. Ser actriz porno es aspiracional para ellas. Las bogotanas quieren ser objetos de deseo. Las excita que los espectadores se masturben viéndolas. Quieren ser las cerezas del pastel”.

Estos productores que llevan cerca de 15 años en esa actividad no solo en Colombia, sino para España, Rusia, Rumania, Estados Unidos y otros países, insisten que las bogotanas son la mejor inversión en el porno:

“El 90 % de aplicaciones [aspirantes] para ser actriz porno provienen de la capital. Las chicas bogotanas son las mejores. Puedo decir que el 80 % con las que trabajo son rolas, no importa la profesión: modelos webcam, deportistas de liga, acompañantes, azafatas, abogadas, enfermeras, agentes de tránsito, todas son excelentes. Prefiero pagar por tiquetes Bogotá-Medellín para que trabajemos porque es la mejor inversión”, asegura Andrea García en la entrevista con Cívico.

Además, la mujer agrega que en el mundo “ha cambiando la mentalidad y el porno ya no es visto como algo cochino ni aberrante”.

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Los productores, también, dicen que las caleñas, las paisas o las pereiranas son las mujeres más exóticas y deseadas en el cine para adultos, pero que les falta actitud.

Prefiero la convicción de las rolas, eso se evidencia en las escenas. No es un tema de experiencia, sino de actitud […]. Las bogotanas que llegan a mí se sollan el tema, lo gozan, quieren experimentar, quieren jugar ese rol. Muchas no lo hacen por dinero”.

Las colombianas son las más codiciadas…

Cifras conocidas por Cívico reflejan que las latinas ocupan un 20% de la industria de la pornografía en el mundo. Dentro de ese rango, las colombianas son las más solicitadas, seguidas por las mexicanas, argentinas y las brasileñas.

Las latinas entran ganando siempre. Somos morbosas, tenemos malicia, chispa; en esa medida una gringa nunca va a dar la talla. Quizá la técnica la tienen muy bien, muy clara, tienen mucha experiencia, pero el picante de una latina y el apetito de una bogotana no es comparable con esas chicas”, puntualiza Andrea García.