Mundo
La Unión Europea se suma a EE. UU. e impone condición a colombianos: será clave para viajar
Tú navegador no es compatible para reproducir este audio
Identificaron una disminución en la capacidad reflectante del planeta, especialmente en el hemisferio norte, lo que podría afectar el equilibrio climático.
Un estudio de la Nasa reveló que la Tierra refleja cada vez menos luz solar, fenómeno que evidencia un oscurecimiento progresivo del planeta entre 2001 y 2024. El hallazgo, difundido en la revista Proceedings of the National Academy of Sciences (PNAS), advierte que la pérdida de reflectividad —conocida como albedo— es más notoria en el hemisferio norte.
(Vea también: Gigantesco objeto de la Nasa cayó en medio de una granja: traía sus buenos secretos del cosmos)
El equipo de investigación liderado por Norman Loeb, del Centro dae Investigación Langley de la Nasa, analizó datos satelitales que mostraron una desigualdad energética entre los hemisferios. El hemisferio sur capta más energía radiactiva en la atmósfera superior, mientras el norte presenta una pérdida neta. Loeb y su grupo señalaron que, aunque antes se creía que las corrientes oceánicas y atmosféricas compensaban esas diferencias, en las últimas dos décadas ese equilibrio ha disminuido.
Los investigadores midieron una captación promedio de energía solar entre 240 y 243 vatios por metro cuadrado, con una variación de 0,34 vatios por década. Aunque el cambio parece pequeño, el valor es estadísticamente relevante y tiene implicaciones para el sistema climático. Entre las causas, la Nasa destacó las modificaciones en la cobertura de nubes, el vapor de agua y la reducción del hielo marino, factores que disminuyen la capacidad del planeta para reflejar la radiación solar.
(Vea también: Con solo 13 años, María Paz Sandoval lleva la ciencia del Pacífico colombiano hasta la NASA y más allá)
Los expertos señalaron que el derretimiento de la nieve y el hielo en el hemisferio norte ha contribuido al oscurecimiento del planeta. A esto se suman los efectos de los aerosoles —pequeñas partículas en suspensión— que influyen en la formación de nubes y en la reflexión de la radiación. Mientras la contaminación por partículas ha bajado en Europa, Estados Unidos y China, eventos como los incendios forestales en Australia y la erupción del volcán Hunga Tonga en el Pacífico sur han incrementado la cantidad de aerosoles en el hemisferio sur.
Por último, los científicos advirtieron sobre el impacto de este desequilibrio en los modelos climáticos, pues la pérdida de simetría entre hemisferios podría modificar el comportamiento del clima global. Entender estos procesos, concluyó la Nasa, es clave para ajustar las proyecciones sobre el calentamiento terrestre y los patrones atmosféricos del futuro.
Sigue leyendo