Fuertes cuestionamientos al papel del árbitro Jhon Ospina en clásico entre DIM y Nacional

Duras críticas dejó la presentación del árbitro Jhon Alexander Ospina, en el partido que ganó Independiente Medellín (4-3) frente al Atlético Nacional, por la fecha 10 de la Liga BetPlay 2 2022. Juego en el que se registraron múltiples retos en los que no estuvo a la altura.

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La primera acción en la que intervino el juez, con el apoyo del tolimense Nicolás Gallo en el VAR, se dio a los 32′, cuando el arquero Andrés Mosquera Marmolejo -según el colegiado- le cometió falta en el área al defensa Álvaro Angulo, del ‘verde’. Jugada en la que no hubo mayor discusión.

Sin embargo, la gran polémica del derbi surgió a los 54′, cuando Ospina le sacó la segunda amarilla al volante Andrés Ricaurte y por ende lo expulsó del juego. Una falta sobre Yeison Guzmán que el árbitro consideró para amonestación, pero que dañó el trámite del cotejo, pues se consideró exagerada.

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Y como si no fuera suficiente, a los 60′, el árbitro del colegio del Quindío, de origen caleño, pitó un cuestionado penal por una mano que -a la luz de la revisión de la televisión- nunca existió. El balón le pegó al volante Adrián Arregui en su pierna, pero según Ospina dio en su codo, algo que no fue.

Esta jugada dio para todo tipo de comentarios en las redes sociales, y una fuerte protesta por parte del plantel del ‘Rojo’, que no dudaron de reclamar la acción contra su equipo. Las imágenes fueron concluyentes: la trayectoria del esférico fue vertical, sin que contara con un desvió en otra extremidad.

En la que sí acertó al 100% fue en la repetición del penal ejecutado por el delantero Jéfferson Duque, ante el adelantamiento del golero Mosquera Marmolejo, quien le atajó el cobro al ariete, pero sin tener -al menos- un pie en la línea de gol. Fue en la única jugada en la que no tuvo yerro alguno.

Ni con esas decisiones, que claramente lo favorecieron, el visitante pudo lograr el empate. Eso sí, estuvo muy cerca de conseguirlo, pues durante casi todo el segundo tiempo sometió al DIM; que pasó de un primer tiempo de ensueño, a una etapa complementaria de aguante y orden defensivo.