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En ocasiones, mientras dormimos, experimentamos molestos calambres que interrumpen el sueño. Estos espasmos musculares pueden afectar diversas zonas del cuerpo, causando malestar y perturbando el descanso.
La postura al dormir juega un papel esencial para prevenir esta situación. A continuación, le contaremos algunas recomendaciones prácticas para adoptar posiciones que ayuden a minimizar la incidencia de calambres nocturnos.
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¿Cuáles posiciones al dormir ayudan a prevenir los calambres?
- Posición de perfil: acuéstese de lado con las piernas ligeramente flexionadas. Luego, coloque una almohada entre las rodillas para mantener la alineación de la columna vertebral.
- Posición fetal: acuéstese de lado y lleve las rodillas hacia el pecho. También puede colocar una almohada entre las rodillas.
- Posición de almohadas: acuéstese boca arriba con una almohada bajo los tobillos. Esto ayuda a mantener las piernas ligeramente elevadas y puede reducir la tensión muscular.
- Posición de “soldado”: acuéstese boca arriba con los brazos a los lados y las piernas extendidas. Coloque una almohada bajo las rodillas para aliviar la presión en la parte baja de la espalda.
Algunos consejos adicionales para prevenir calambres nocturnos incluyen:
- Realice suavemente estiramientos musculares antes de ir a la cama.
- Manténgase bien hidratado durante el día, pero evite beber grandes cantidades de líquidos justo antes de acostarse.
- Consulte con un profesional de la salud sobre la posibilidad de tomar suplementos de magnesio, potasio o calcio, ya que la deficiencia de estos minerales puede contribuir a los calambres.
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Recuerde que es importante ajustar estas sugerencias según sus necesidades personales. Si los calambres persisten, es recomendable consultar a un médico para obtener orientación adicional.
*Este artículo fue escrito y curado por periodistas del equipo de Robby Salud, con apoyo de una inteligencia artificial que utiliza machine learning para producir texto.
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