Si Donald Trump gana la presidencia, estará rodeado de muchos aduladores y ningún experto en política exterior

Es la conclusión que saca Andrés Oppenheimer luego de entrevistar a varios conocedores del tema y considerar que el magnate no escucha consejos, únicamente halagos.

En su columna de El País de Montevideo expone que “los exfuncionarios de política exterior republicanos -aun los más duros- están horrorizados por las posturas de Trump. La mayoría de ellos considera, y con razón, que Trump es un demagogo racista que ha insultado a casi todos los países con los cuales Estados Unidos debería tratar de tener mejores relaciones, y que cree que lo sabe todo mejor que nadie”.

Da rabia ver la selección de blanco y la tribuna de amarillo

Jaime Enrique Sanz Álvarez considera que la selección Colombia “ha logrado fijar la camiseta amarilla como su principal distintivo con un arraigo total en la afición”, por lo que considera incomprensible “que, por decreto, la Federación decida que la camiseta de la Selección es blanca. A nadie se le ocurriría pensar que Italia cambie la ‘azurra’, o Francia la ‘blue’, México la verde, o España y Chile ‘la roja'”.

En su columna de La Patria, Sanz también celebra los cambios en el reglamento del fútbol aprobados por la ‘International Board’ y opina sobre la continuidad de James Rodríguez en el Real Madrid: “Por el modelo de juego, no tiene puesto en la nómina titular y […], quedarse para demostrar que es útil parece una apuesta arriesgada, mucho más cuando, como se demostró en la final de la ‘Champions’ también dejó de ser primer suplente”.

Rubén Aguirre será recordado por alejarse de los problemas del elenco de ‘El Chavo’

“Aguirre siempre revalidó el impacto de la serie de televisión más visto de la historia en Latinoamérica, afirmando que lo fue por reflejar la inocencia y bondad de la gran mayoría de sus habitantes”, argumenta un editorial de El Nuevo Siglo.

“Como actor, pero más como persona, Aguirre siempre se distinguió por ser respetuoso y ajeno a los problemas que luego se dieron entre el creador del programa y varios de sus actores”, agrega el medio. “Paz en su tumba”.

Al decir que si no se hace la paz las Farc harán una guerra urbana, Santos pone en entredicho su idoneidad como presidente

Así lo señala Gustavo Duncan en su columna de El país de Cali, en la que se refiere a la polémica frase que el presidente soltó durante el Foro Económico Mundial, que según el columnista no es solo una “metida de pata”, sino una tremenda ‘cagada’, ya que por una parte admite “mientras negociaban las Farc se preparaban para la guerra y no hizo nada para impedirlo”.

Su ‘amenaza’, también transmite a la sociedad un mensaje desmoralizador de que si no se acepta la paz en los términos de las Farc el Estado no podrá evitar la violencia de esta guerrilla en las ciudades. Para Duncan, el presidente es muy torpe para convencer, a través de la palabra, a “amplios sectores de la población de la conveniencia de una política dada” y no logra sintonizarse con “los sentimientos y los intereses de la gente común”.

El nuevo Código de Policía les otorga a los policías una “confianza irrestricta” para tomar decisiones relacionadas con derechos fundamentales de los colombianos

Esta es una de las preocupaciones de la sociedad colombiana que recoge la editorial de El Espectador, donde plantea la falta de debate que se dio para aprobar el nuevo Código que otorga demasiados poderes a la policía, ha sido una crítica razonable al tema, ya que desafortunadamente en el pasado “el abuso de la autoridad ha servido para victimizar a personas indefensas ante la discrecionalidad de agentes oficiales”.

La editorial añade que si bien no debe partirse de la “mala fe” de los policías, para que la sociedad confíe en la institución, sus potestades deben estar “bien delimitadas para detectar con facilidad cuando haya una extralimitación de las funciones”, una tarea que tal vez le corresponderá a la Corte Constitucional, ante el afán del Congreso.

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