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El presidente Gustavo Petro no termina de salir de un escándalo para entrar en otro. Una semana después de que su hijo mayor, Nicolás Petro, fuera capturado y aceptara que a la campaña de su padre entró dinero sin reportar y que habría superado los topes, este domingo se conocieron detalles de otra polémica alrededor de quiénes aportaron plata a su contienda electoral.
Según una investigación de Noticias Caracol, la Fiscalía está investigando el papel que habrían tenido un narco condenado, y su esposa, en la campaña presidencial en Casanare. El primero es Juan Carlos López Macías, alias Sobrino, ya condenado en Estados Unidos, y la segunda es Sandra Navarro Trujillo.
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De acuerdo con el informe periodístico, Navarro Trujillo hizo parte del comité de la Colombia Humana en ese departamento durante la campaña y en la casa de ambos se celebraron constantes mítines políticos.
La revelación periodística puso a trinar al presidente Petro, quien hasta el mediodía del pasado lunes, y en medio de la crisis de orden público en el Cauca, seguía defendiéndose en la red social. Sin embargo, una lupa a sus trinos pone en evidencia que su defensa no tiene nada que ver a lo revelado por el noticiero y, además, no se ha referido a la verdadera polémica del caso: ¿Hubo un narco que ayudó a su campaña electoral en el Casanare?
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Para empezar, la defensa del presidente se centró en afirmar que el contenido de la investigación era falsa, que nunca hizo ninguna manifestación en Yopal y que tampoco recibió aportes de nadie del Casanare.
El primer trino, sin embargo, no tuvo ningún sustento para soportar sus afirmaciones y, por el contrario, sirvió para que, horas después, la propia persona encargada de la campaña en Casanare, Sonia Bernal, señalara públicamente que el entonces candidato, Gustavo Petro, sí realizó una visita y emitió un saludo en la capital, el 13 de junio de 2022, en el marco de una actividad con campesinos llaneros. Petro y Bernal aclararon un tema sobre el dinero, que en ningún momento mencionó Noticias Caracol.
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Eso sí, Sonia Bernal, que ahora trabaja en el Ministerio del Interior, aclaró que la dirección política y electoral de la campaña presidencial de Gustavo Petro “estuvo exclusivamente bajo mi responsabilidad” y que el único gestor logístico de la campaña en el Casanare fue Osbaldo Cáceres.
Sobre Sonia Bernal, el presidente Petro también trinó: “Las personas que menciona (el noticiero) no son directivos ni de Colombia Humana ni del Pacto. La persona encargada de la campaña en Casanare se llama Sonia Bernal y no Sonia Navarro”.
Con una perla más: el propio jefe del comité político del partido del presidente en Casanare, Fabio Vargas, aceptó en una conversación que las hermanas Navarro Trujillo hicieron aportes a la campaña presidencial. La defensa del presidente Petro en Twitter no paró allí.
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Eduardo Noriega, Delegado de la Colombia Humana, respondió al noticiero que ese documento publicado por Petro es el resultado de unas supuestas alertas tempranas que se emitieron dentro del movimiento en Casanare en 2022. Y que, de hecho, directivos nacionales y locales lo que hicieron fue evitar que personas cercanas a narcotraficantes “permearan la Colombia Humana”.
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Sobre la casa donde el narco López fue capturado, el delegado Noriega respondió que no hay evidencia que allí hubieran acudido directivos de la Colombia Humana y que esas imágenes corresponderían al trabajo político de “grupos voluntarios que espontáneamente expresan su apoyo al movimiento, sin que esto quiera decir que tuviera algún tipo de responsabilidad dentro de la campaña”.
El noticiero ha ratificado la información publicada en las distintas emisiones siguientes a la edición del pasado domingo en la noche. Incluso, el periodista investigativo Ricardo Calderón ha encarado a las autoridades de la Colombia Humana que han salido a desmentir el informe.
El presidente Gustavo Petro, incluso ofreciendo disculpas a la Fundación para la Libertad de Prensa (FLIP), ha solicitado inminentemente la rectificación de Noticias Caracol.
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Tanto el jefe de Estado como sus aliados políticos han promovido el discurso de que todo esto se trataría de una estrategia para desviar la atención de temas como la multimillonaria multa pagada por el Grupo AVAL en Estados Unidos por el caso Odebrecht. No obstante, las respuestas de Petro dejaron más dudas que certezas.
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