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Así lo denunciaron las concejales María Victoria Vargas, del Partido Liberal, y Gloria Stella Díaz, del Mira.

De acuerdo con un comunicado de Vargas, la solicitud de que se exima a la administración Distrital de pagar el costo del alumbrado público —que en 2015 fue de 3.619 millones de pesos— y ese empiece a ser asumido por los habitantes de la capital está incluída en el artículo 121 del Plan de Desarrollo de Peñalosa, y no es la primera vez que un alcalde lo pide, pues esa pretensión ya había sido negada en otras oportunidades:

Con anterioridad la posibilidad de transferir este pago a los usuarios fue negada en varias ocasiones, pues el Concejo ha considerado que el servicio de alumbrado público contribuye en gran medida a mejorar la percepción de seguridad de la ciudad, y por lo tanto debe ser asumido por el Gobierno Distrital”.

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Por su parte Díaz, citada por RCN La Radio, agregó que este sería uno de los 6 “impuestos disfrazados” que el alcalde Peñalosa pretende que el Concejo le apruebe de su Plan de Desarrollo, incluso, aunque algunos carecen de  estudios técnicos y no explican cómo serían aplicados a los bogotanos:

No hay bolsillo que aguante y menos el de los bogotanos. Cobrar el impuesto de alumbrado público es precipitado, improvisado e inconveniente […] Son al menos seis los impuestos que trae disfrazados el Plan de Desarrollo, el hecho hace que los ciudadanos que ya viven en situaciones económicas difíciles ajusten aún más su cinturón de forma inesperada”.

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