El portal aseguró que mediante un comunicado, la Archidiócesis Napolitana explicó que un joven gigoló llamado Francesco Mangiacapra le envió un informe el pasado 28 de febrero a la entidad eclesiástica , el cual tenía información comprometedora de algunos sacerdotes.

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El documento que aseveró el medio está conformado por 1.200 páginas, tiene imágenes explícitas, conversaciones de WhatsApp y documentos de los religiosos implicados. En el informe enviado el arzobispo pide que: “Aquellos que se han equivocado deben pagar y deben ser ayudados a arrepentirse del mal causado”.

Por esto, dentro del comunicado aseguraron que dado que varias diócesis (territorios católicos) están implicados, fue necesario enviarlo a las autoridades eclesiásticas competentes, para que el Vaticano tome las medidas que considere pertinentes.

En las 1,200 páginas probatorias están implicados 34 sacerdotes y 6 seminaristas. Sin embargo, no hay señales de pederastia, “son pecados, no delitos”, dijo Sepe.

La noticia salió a la luz gracias al mencionado portal, y allí aseguran que los sacerdotes hacían parte de orgías gais, tenían contacto de tipo sexual mediante aplicaciones de mensajería móvil y se exhibían por medio de cámaras web.

Además de esto, un ayudante de la basílica de San Juan Letrán, en Roma, paseaba en un vehículo persuadiendo a jóvenes con dinero para que se unieran a las orgías y asistieran a las fiestas en discotecas.