Hombre que asesinó a sus dos hijos en La Guajira sobrevivió y se niega a hablar del crimen

Con el pasar de las horas, se conoce más información sobre el hallazgo de los dos hermanos de 7 y 3 años asesinados, encontrados colgados en un árbol en la vía entre Distracción y San Juan del Cesar, el pasado 31 de diciembre.

La Policía Nacional confirmó la identidad del padre de los menores, Luis Fernando Mojica Zabala, de 24 años, quien es el principal sospechoso del atroz crimen y actualmente está bajo custodia policial en el Hospital San Rafael de San Juan del Cesar, recuperándose de una fractura en la cadera causada por ser arrollado por un bus interdepartamental en la madrugada del 31 de diciembre, un incidente que las autoridades catalogan como un intento de “atentado en contra de su integridad y contra su vida“, según el coronel Álvaro Mora, comandante de Infancia y Adolescencia de la Policía.

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El comandante también dijo que: “Se está en el desarrollo de los actos urgentes para generar la orden de captura que permita la judicialización y que responda ante la autoridad competente por este lamentable hecho”.

El presunto responsable se niega a hablar, según información de la prensa local, y no ha dado ninguna declaración a las autoridades, familiares o incluso a un sacerdote que fue llevado al hospital antes mencionado con el propósito de dialogar sobre lo ocurrido.

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La madre de los niños, Andrea de Agua, quien no se encontraba en el departamento en el momento del trágico suceso, había viajado al municipio de Facatativá, Cundinamarca, en busca de oportunidades laborales tres días antes del incidente.

Al enterarse de la desaparición de los menores, pidió ayuda a familiares y amigos para recolectar dinero y trasladarse hasta Fonseca, ya que no contaba con los recursos suficientes para el transporte y así reclamar los cuerpos de sus hijos, que solo podrían ser entregados a ella.

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El coronel Álvaro Mora proporcionó una narración de cómo habrían transcurrido los hechos, indicando que el padre llegó a la casa de la abuela de los menores y solicitó llevarse a los niños para pasar las fiestas de fin de año con él. Ante la negativa de la abuela materna, los sacó sin su consentimiento y los llevó a una zona enmontada entre Distracción y San Juan del Cesar, donde presuntamente los asfixió hasta causarles la muerte.

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Se estima que los menores fueron asesinados entre la 1 y 2 de la madrugada del domingo 31 de diciembre. Los motivos apuntan a la decisión de la madre de no continuar la relación con su pareja, situación que Mojica Zabala no habría aceptado, llevándolo a acosar e intimidar violentamente a la madre.