Gustavo Gómez explota por falta de mano dura con delincuentes: "No queremos comer m..."

En su editorial de este jueves, el periodista lamentó el asesinato de policías en Tibú, Norte de Santander en un atentado que calificó como “uno de esos ejercicios de crueldad que los amos de la perversidad suelen escenificar cada tanto frente a nuestras narices”.

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A partir de ahí, arremetió fuertemente contra el Gobierno: “No se puede ceder ante la delincuencia. A los facinerosos no hay que darles trato especial, ni hacerles llegar misivas sumisas, ni decorarles su estatus de canallas con serpentinas políticas, ni graduarlos de actores de la prosperidad”, enfatizó.

“A esos que nos asesinan, secuestran, violan, extorsionan, amenazan y despojan, hay que aplicarles la fuerza del Estado. No hay otra manera de sentarlos a dialogar”, añadió.

Gómez también recalcó que el país sigue en incertidumbre política y económica que ha repercutido en la inseguridad. De ahí partió para hacer su crítica más mordaz:

“Y en esas estamos, viendo cómo la delincuencia engorda, florece, se empodera, se llena de bríos para ponernos a todos a comer mierda. Mucha mierda. Y no queremos comer mierda. Queremos que se la sirvan a ellos, toda, todita, toda”, sentenció.

A renglón seguido pasó a pedir que “el gobierno asuma de una vez por todas una de sus grandes responsabilidades”.

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“Lo que necesitamos hoy y ahora es que alguien controle a los bellacos que no nos dejan pegar el ojo, que se pasean tan campantes por los pueblos, que reclutan a nuestros niños, que graban videos con arsenales entre manos, que extorsionan a todo el que ose montar un negocio, que se adueñaron de nuestras carreteas, que ponen vallas a las entradas de nuestros municipios, que se regodean con nuestro miedo”, reiteró.

Eso sí, el comunicador tampoco cerró la puerta al diálogo: “Hay que hablar con ellos, es sensato, es válido. Todo intento de resolver la violencia que nos azota, tiene asidero. Pero le pedimos al presidente de la República y a su ministro de Defensa que den órdenes contundentes, no como las de Icopor de los últimos meses”.

Escuche a continuación el editorial del periodista: