Este nuevo decreto les permitirá resolver su ituación jurídica a cerca de la mitad de los miembros de la guerrilla, actualmente concentrados en 26 zonas veredales y que tienen procesos penales por delitos como rebelíon, porte ilegal de armas y otros considerados políticos, es decir, objeto de amnistía.
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“Las amnistías son de carácter administrativo y solo aplican para miembros de las Farcconcentrados en zonas veredales y no para los que están en las cárceles”, explicó el ministro de Justicia, Enrique Gil.
Los beneficios de este nuevo decreto cobijan a los miembros de las Farc que ya cumplieron los requisitos como la dejación de armas, su plena identificación por parte de las autoridades, y ya firmaron su acta de compromiso de no volver a levantar las armas, publicó Blu Radio.
El último requisito es la acreditación como miembros de las Farc que debe expedir la oficina del alto comisionado para la paz. Este último requisito era el que estaba demorando la expedición de las amnistías, pues el gobierno revisó en detalle las listas de los insurgentes postulados para evitar la inclusión de personas que no tuvieran otros procesos penales en la justicia ordinaria.
“Este documento les permite acceder a los planes y programas de reincorporación a la vida civil que se acuerden, así como al Sistema Integral de Verdad, Justicia, Reparación y No Repetición (SIVJRNR), en particular a los procedimientos establecidos en el Acuerdo sobre la Jurisdicción Especial para la Paz incluyendo los de la ley de amnistía, sobre la base del compromiso de la organización de dejar las armas y no volver a utilizarlas”,
agregó el ministro Gil en un comunicado.
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