El restaurante en Nueva York donde no hay chefs y abuelas de todo el mundo son contratadas

Los platos elaborados por las abuelas son auténticos tesoros culinarios impregnados de amor, tradición y cuidado meticuloso. Estas recetas transmitidas de generación en generación no solo satisfacen el paladar, sino que también cuentan historias de experiencias compartidas y raíces familiares.

Las cocinas de las abuelas son verdaderos santuarios de sabiduría gastronómica, donde ingredientes simples se transforman en manjares exquisitos gracias a secretos culinarios transmitidos de madre a hija o hijo. Cada plato lleva consigo la esencia de la memoria familiar, una conexión tangible con el pasado y un lazo que une a las generaciones.

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La magia de los platos de las abuelas no solo radica en la destreza técnica, sino también en la intuición innata que solo la experiencia puede conferir. Sus manos, hábiles y experimentadas, crean guisos, pasteles y platillos que no solo alimentan el cuerpo, sino que también nutren el alma. Las abuelas infunden sus creaciones con un toque personal, una pizca de cariño que transforma cada bocado en un abrazo reconfortante.

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En Nueva York, un restaurante llamado “Enoteca Maria” hace algo muy particular, y es que, en lugar de contratar chefs profesionales, emplea a abuelas de varias partes del mundo para hacer del menú diario el mejor plato. Cada semana, una abuela diferente es quien cocina para los comensales en el restaurante, algo especial que hace que los platos sean siempre diferentes.

La idea de este restaurante fue de Jody Scaravella, quien inició este negocio luego de la muerte de su abuela Domenica, es por esto que él sabía que le haría falta las comidas caseras que disfrutaba en algunas ocasiones con su familia. Jody reó “Enoteca María” con lo que descubrió traer de vuelta esa sensación hogareña frente a la cocina moderna.

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Gracias a la diversidad que las abuelas traen a este restaurante, cuenta con varios tipos de comidas como: carnes, pastas, pizzas y verduras de diferentes países. Y es que, como algunas abuelas no tienen amplia experiencia cocinando, el restaurante les ofrece un entrenamiento previo para garantizar el mejor servicio.

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Este lugar se ha hecho muy popular en el ámbito gastronómico, pues aparte de hacer algo muy especial de emplear a las abuelas, también esta brindando una experiencia única para los comensales.