Para el ser humano es primordial mantener su teléfono celular bien cargado, debido a que desde allí se realizan muchas tareas y trabajos. Uno de los hábitos más comunes, aunque muchas veces inadvertido, es dejar conectado el cargador del celular durante todo el día, incluso cuando el teléfono no se encuentra cargando. Este hábito aparentemente inofensivo tiene consecuencias tanto para el medio ambiente como para su bolsillo.

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¿Dejar conectado el cargador del celular gasta mucha energía?

Aunque pueda parecer que un cargador enchufado sin un dispositivo conectado no consume energía, en realidad este fenómeno es conocido como “consumo fantasma” o “consumo vampiro”.

Los dispositivos electrónicos, incluidos los cargadores de celular, continúan utilizando una cantidad mínima de energía cuando están enchufados, aunque no estén cargando un dispositivo. Sin embargo, aunque el consumo sea mínimo, esta pequeña cantidad de energía acumulada puede generar un impacto significativo en su recibo de la luz.

El consumo eléctrico individual de un cargador de celular puede parecer insignificante, pero cuando se multiplica por la cantidad de dispositivos electrónicos en un hogar, la suma puede ser sorprendentemente alta. Los expertos en eficiencia energética estiman que dejar cargadores enchufados sin usar puede representar hasta un 10% del consumo total de energía de un hogar.

Tenga en cuenta que al dejar el cargador del celular conectado todo el día, este puede sobrecalentarse, causando el deterioro del mismo cargador o inclusive generando un incendio.

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El acto aparentemente pequeño de dejar un cargador de celular enchufado durante todo el día puede tener consecuencias a largo plazo tanto para el medio ambiente como para la economía doméstica.

*Este artículo fue escrito y curado por el equipo de Robby Tecnología con apoyo de una inteligencia artificial que utiliza machine learning para producir texto similar al humano.