Dan detalles de cómo se habría planeado asesinato en Aguachica: seguían a la familia

Un equipo especial de criminalística ha logrado reconstruir cómo se planeó y ejecutó la masacre que acabó con la vida de los cuatro integrantes de la familia Lora Rincón el pasado 29 de diciembre en el restaurante ‘Sorbetes y Jugos’ de Aguachica, Cesar. Este crimen, que ha sacudido al país, fue perpetrado por tres sicarios que actuaron con precisión y brutalidad.

La planeación del ataque

Según fuentes judiciales, los responsables utilizaron dos motocicletas para ejecutar el crimen. Uno de ellos, encargado de hacer seguimiento a la familia desde tempranas horas, los vigiló incluso durante su asistencia a la iglesia Príncipe de Paz, en el barrio Villa Paraguay.

Este hombre coordinaba constantemente con los otros dos sicarios, marcando la ruta para que la emboscada ocurriera en un momento de máxima vulnerabilidad.

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Cuando la familia se encontraba reunida en una terraza del restaurante, el primer sicario dio la señal para que los otros dos llegaran y atacaran.

Los asesinos dispararon con precisión letal, apuntando a la cabeza y el pecho de las víctimas. Marlon Lora, su esposa Yurley y su hija Ángela Natalia murieron instantáneamente, mientras que el joven Santiago, aunque sobrevivió inicialmente, tenía heridas graves que hicieron imposible salvar su vida.

La huida y avances en la investigación

Los homicidas huyeron rápidamente en las dos motocicletas, que fueron abandonadas a unas cuadras del lugar del crimen. Las autoridades han logrado elaborar retratos hablados y tienen pistas sobre la identidad de los criminales, quienes, según informaciones preliminares, ya habrían salido del municipio. Uno de ellos, incluso, podría haber abandonado el país al tratarse de un ciudadano extranjero.

El análisis de videos de cámaras de seguridad, testimonios y un detallado mapa del lugar del crimen han permitido a las autoridades avanzar significativamente en la investigación.

Hipótesis del móvil del crimen

Inicialmente se barajó la posibilidad de que el ataque estuviera dirigido a otra persona. Sin embargo, las evidencias recopiladas, como el hecho de que la mesa tenía exactamente cuatro sillas y la precisión con la que los sicarios dispararon, confirman que el objetivo eran exclusivamente los miembros de la familia Lora Rincón.

Aunque se sospecha que el pastor Marlon Lora pudo haber recibido amenazas o extorsiones de grupos criminales que operan en la región, el pastor Bedel Sangregorio Torres, representante del Concilio Iglesias Bíblicas Misioneras, aseguró que Lora nunca mencionó nada al respecto.

Hoy se realizará el sepelio de Marlon Lora, su esposa Yurley y sus hijos Ángela Natalia y Santiago. Se espera que cientos de personas, incluidos miembros de la comunidad religiosa y habitantes de Aguachica, acompañen a la familia en este último adiós.

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Mientras tanto, la comunidad clama justicia y las autoridades intensifican las labores para capturar a los responsables de este brutal acto que ha dejado una profunda herida en Aguachica y en todo el país.