De la Calle le hace el quite a la consulta con los jefes de izquierda

El candidato liberal anunció que no se le va a medir a la consulta sectorial con Clara López, Gustavo Petro y Carlos Caicedo, porque va a esperar el desenlace electoral después de las elecciones legislativas de marzo.

Dice de la Calle, en una entrevista para El Tiempo, que el horizonte después del 11 de marzo podría cambiar de tal manera que la realidad política dejará al descubierto qué fuerzas son las que quieren buscar alianzas.

“Me refiero a que las elecciones de marzo pueden generar un panorama político que lleve al agrupamiento de distintas fuerzas alrededor de esa nueva realidad. Ese es un punto importante, porque también quiero reiterar que el núcleo que uniría a esa coalición enorme es, fundamentalmente, el apoyo al proceso de paz”, destacó el candidato liberal a ese periódico.

Una salida estratégica que lamentó Clara López porque aumenta el riesgo de que la alianza, que ella llama por el cambio social de Colombia, se disperse.

Una opinión distinta tienen Rudolf Hommes, Mauricio Vargas y María Isabel Rueda quienes en sus columnas de este domingo en El Tiempo coinciden en que el Partido Liberal no le convenía una alianza con un frente político en donde estuviera Gustavo Petro porque “los candidatos al Congreso creen que Petro les quita votos”, aseguró el exministro de Hacienda.

El exalcalde de Bogotá “ni siquiera es una opción a considerar por su clara deriva chavista”, apuntó a su vez Vargas quien agrega de la Calle debió cotejar su imagen porque claramente se veía como un político débil por su “actitud de andar rogando para entrar en una de las coaliciones en formación”.

Esa tesis la comparte Isabel Rueda quien afirma en El Tiempo que  el líder liberal no “puede ser socio de quien a su paso por la alcaldía de Bogotá demostró, como Petro, su absoluta incompetencia administrativa”.

En tanto la coalición de centro derecha entre el uribismo y el Partido Conservador también tambalea por culpa de Alejandro Ordoñez. El exprocurador podría terminar de romper el idilio político que llevaría a un solo candidato, representante del ‘No’ en el plebiscito por la paz,  y eso favorecería a la campaña de Germán Vargas Lleras que de todas formas, aun espera llegar con la suficiente fuerza electoral para pasar a la segunda vuelta en donde sellaría una alianza con el uribismo y se unirían todas las vertientes cristianas, vaticinó Hommes en El Tiempo.