Dan a conocer condena al menor que asesinó a Jean Claude Bossard en Bogotá; juez le pegó regaño

Tú navegador no es compatible para reproducir este audio

El padre del joven asesinado aseguró que el juez le imputó 3 delitos y no aceptó uno. La sentencia fue similar al del sicario que disparó a Miguel Uribe.

Jean Claude Bossard, un joven emprendedor y reconocido creador de contenido, perdió la vida a los 29 años el pasado 2 de diciembre en un fatídico suceso en el norte de Bogotá. El barranquillero fue víctima de un intento de robo al ser interceptado por hombres armados en Usaquén, cuando se opuso a que le robaran el celular.

(Vea también: Aparecen videos de ladrones que mataron a un joven en Bogotá; ya se habían enfrentado a la Policía)

Uno de los asesinos fue abatido por policias en el lugar y el otro, que le disparó a Bossard, era un menor de 16 años que, después de quitarle sus pertenencias, decidió atacarlo con dos disparos, uno de ellos en el pecho, que fue el que terminó quitándole la vida al barranquillero.

Ahora, en exclusiva de Bajo Sospecha, de Pulzo.com, Jean Claude Bossard, el padre que se llama igual que su hijo, reveló que este menor fue condenado a siete años y medio de aprehensión, por lo que deberá pagarlos al igual que el menor que le disparó a Miguel Uribe Turbay.

“A este muchacho le pusieron siete años y medio, el juez le dijo agradezca que es menor de edad, porque si fuera adulto le pone al menos 50 años de cárcel”, contó Bossard en Bajo Sospecha, de Pulzo.com.

Generoso, dinámico y tenaz, Bossard es el prototipo de lo que aquellos que lo conocieron catalogan como un “barranquillero auténtico”. Sus amigos y familiares recuerdan su personalidad vibrante y su amor por los deportes extremos. Su carácter arrollador y audaz, contagiaba a quienes lo rodeaban, dejando siempre una huella indeleble.

Además de ser administrador de empresas, Bossard trabajó como coordinador de logística durante los Juegos Centroamericanos y del Caribe de 2018. Sus habilidades y destrezas no solo le permitían adaptarse a cualquier circunstancia, sino también a adoptar roles distintos y desafiantes en diferentes esferas de su vida.

Con su muerte prematura—tres días antes de cumplir sus treinta años—, queda un vacío entre sus más cercanos, pero también un legado de vitalidad, tenacidad y pasión por los deportos extremos. “Vivió una vida más plena e intensa que muchos que llegan a viejos. Lo recordaremos siempre con cariño”, aseguró uno de sus conocidos al medio local.