Abogado se fue a trabajar a Barranquilla y desapareció; le confesó algo extraño a su mamá

Andrés Felipe Núñez González salió para Barranquilla el 15 de febrero de este año, con el fin de concretar una oferta de trabajo como abogado. Al llegar a la capital de Atlántico se hospedó en una vivienda ubicada en el barrio Paraíso, norte de la ciudad.

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De allí, salió el pasado domingo 5 de marzo y desde entonces no ha vuelto al lugar donde residía, situación que tiene alarmados a sus seres queridos, en especial su mamá, quien contó algunos detalles que su hijo le habría revelado antes de su desaparición.

Ese día, Andrés Núñez tuvo un último contacto familiar con un primo suyo, que también reside en la ciudad, y al que le habría mandado un extraño mensaje, texto narrado por un hermano del hoy abogado desaparecido.

“[…] En ese mensaje le decía a mi primo que lo recogiera rápido, que había alguien detrás de él, buscándolo, que lo ayudara a salir”, explicó el pariente del abogado a Impacto news.

Por su parte, la madre de Andrés Núñez habló de una extraña confesión que su hijo le hizo días antes:

“[…] Me hizo una manifestación extraña. Me dijo que dejara de hablar mal de él, porque iba a hacer que lo mataran, que se le estaba acercando gente muy mala, se sentía perseguido”, reveló la mamá del abogado de 29 años de edad.

De igual manera, su madre cree que a su hijo lo habrían obligado a ingerir alguna sustancia prohibida como la escopolamina.

“[…] Él no está normal, está alucinando como desde el viernes”, dijo la madre del joven tolimense, egresado de la facultad de Derecho de la Universidad Cooperativa de Colombia, sede Ibagué.

Por último, se conoció que la madre y el padre de Andrés Núñez se encuentran viajando hacia Barranquilla para darse a la tarea de buscar a su hijo y para estar al frente de cualquier información que puedan proporcionarles las autoridades.

Qué dice la circular de búsqueda del abogado desaparecido en Barranquilla

Para encontrar lo más pronto posible a Andrés Felipe Núñez González sus familiares le han entregado a la Fiscalía una serie de datos importantes relacionados con las características morfológicas de su ser querido y de la ropa que llevaba puesta el día que lo vieron por última vez.

En la circular de búsqueda se puede leer que el joven es delgado y mide aproximadamente 1,70 de estatura. Usa barba, cabello ondulado corto, color negro, cara ovalada, nariz fileña, boca mediana, cejas pobladas, y ojos medianos.

Asimismo, indica el ente acusador que el día que fue visto por última vez portaba una pantaloneta verde tipo camuflado, camiseta verde, tenis verdes militares o azules.