Controversia en Tolima: jugador que interesa a Nacional se declaró en rebeldía

Aunque solo le restan seis meses de contrato, todo parece indicar que el defensa Sergio Mosquera tiene afán por desvincularse lo más pronto posible de la disciplina del Deportes Tolima. El zaguero, según se conoció este viernes, habría tomado la decisión de presentar su carta de renuncia con justa causa: una figura que en el pasado utilizó el volante Rafael Carrascal para irse de la institución ‘Pijao’.

Así lo reveló el periodista Felipe Sierra, de Win Sports, quien en su Twitter indicó que Mosquera pasó el documento a la dirigencia con fecha del 29 de noviembre, declarándose así en libertad pese a tener vínculo vigente hasta junio del 2023. Una información que de inmediato ‘encendió’ las redes sociales, pues Sergio es uno de los más ‘veteranos’ en el plantel, con seis años en el club.

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“Sergio Mosquera (28) presentó la carta de renuncia con justa causa a #Tolima, el 29 de noviembre. A partir de la fecha, el central de 28 años es jugador libre”, publicó Sierra, en una versión que, hasta el momento, no ha sido ni confirmada por el equipo, en sus canales oficiales, ni tampoco por el futbolista. Pero que desde ya es calificada como una ‘jugada sucia’ por parte del defensor.

Mosquera estaba inmerso en una especie de ‘trueque’ con Atlético Nacional y el volante Bryan Rovira, en una operación que se planteó así: la cesión de Sergio a los ‘verdolagas’, a cambio del pase del mediocampista para la ‘tribu’ y un cargo económico. Pero cuando todo estaba acordado, Rovira se ‘bajó’ de las tratativas y mediante su empresario no dejó en firme el trato, pues quiere ir al exterior.

“Con el jugador [Mosquera] se han cumplido las obligaciones a cabalidad y hasta el momento no tenemos nada diferente a la posibilidad que hubo con Rovira. Que tenemos que replantear con Nacional si ellos mantienen su interés”, expresó el presidente César Camargo al ‘Combo Deportivo’ de Caracol Radio Ibagué el miércoles pasado; lo que causó incertidumbre sobre el futuro del defensa.

Y es que hace recordar lo que aconteció en julio de 2019 con Carrascal, a quien le quedaba año y medio de contrato, pero por intermedio de su representante, el español Pedro Blanco, interpuso este recurso y logró salirse con la suya. Casualmente, la misma figura que utilizó en su momento el volante Guillermo Celis, cuyo apoderado también era Blanco, para zafarse de su contrato con Tolima.

Era bien sabida la urgencia que tenía Camargo y el elenco de Ibagué de hacer negocio con el jugador, pues a partir del 31 de diciembre podía firmar con el club que quisiera sin hacer partícipe al que le dio trabajo desde mediados del 2016: cuando llegó procedente del Envigado F.C. Un club que debe estar muy preocupado por su inversión, pues se dice que aún conserva el 30 % de los derechos.

Esta redacción intentó conocer la versión del implicado acerca de los motivos que lo llevaron a argumentar en esta renuncia, pero fue posible establecer contacto. Por lo pronto, lo que se sabe es que la determinación no cayó nada bien en la familia dueña del club, que no dudaría en tomar acciones legales para hacer valer lo que cree es justo; como ya aconteció con Carrascal, cuando fue al América.