¿Qué cansa más: el fútbol sala o fútbol 11? Expertos ponen fin a la discusión (y a excusas)

Aunque ya se ha conocido brevemente sobre las diferencias existentes, el futsal y el microfútbol, hay otras ramas del balompié que cuentan con particularidades únicas en cuanto a la técnica, el tiempo de juego y el despliegue corporal.

Por eso, esta vez, se hará un contraste entre el fútbol 11 y el fútbol sala, destacando las cualidades y las exigencias que caracterizan a cada disciplina y que han sido una incógnita para todos los amantes de este deporte.

Según confirma el portal especializado Oliver Sports, en el fútbol sala, la exigencia es más anaeróbica, con esfuerzos cortos, pero intensos, lo que genera una acumulación rápida de ácido láctico. A nivel técnico, la toma de decisiones rápida y precisa demanda un gran esfuerzo cognitivo, sumándose a la fatiga física, a pesar que es una disciplina que, gracias a su reglamento, cuenta con cambios ilimitados.

Por otra parte, en el fútbol 11, la demanda es más aeróbica, requiriendo una mayor capacidad cardiovascular para soportar los largos periodos de juego. Además, gran potencia física para los cambios de ritmo que se presentan durante el encuentro, ya que se llegan a recorrer hasta 8 y 12 kilómetros, mientras que en el futsal son 3.5 kilómetros en promedio.

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En conclusión, ambos deportes presentan desafíos físicos y mentales únicos, y determinar cuál cansa más depende de las características individuales de cada jugador y las especificidades de cada partido.

¿Es el fútbol sala más difícil que el fútbol 11?

El fútbol sala exige una explosividad y una agilidad superiores. La menor cantidad de jugadores en la cancha y las dimensiones más reducidas del campo hacen que el juego sea más intenso y cambiante, rasgos que son evidentes en Richard Ríos, quien se formó en esta disciplina y demuestra sus capacidades.

Con respecto al fútbol 11, de acuerdo con Be Soccer, la comprensión táctica, la capacidad de adaptarse a diferentes situaciones de juego y la comunicación efectiva con los compañeros son cruciales. Asimismo, el ritmo es vertiginoso, con constantes cambios de dirección y velocidad. Por lo que se determina que la dificultad de cada disciplina es bastante singular y complicada de clasificar.

¿Por qué los balones de fútbol sala son tan duros?

A diferencia del fútbol al aire libre, el fútbol sala se juega en superficies interiores más pequeñas y con paredes, lo que genera un juego más rápido y con mayor cantidad de impactos.

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Para soportar estas condiciones exigentes, los balones cuentan con una estructura interna robusta, compuesta por múltiples capas de materiales resistentes y duraderos.