Los penales le volvieron a hacer el milagro a Boca, que regresa a una final de Libertadores

Desde el comienzo del partido, el equipo verde se mostró aturdido por la exigencia de las circunstancias y Boca fue el que más impuso condiciones en la primera mitad del partido.

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Fruto de la intensidad de su juego llegó el primer gol, cuando el uruguayo Edinson Cavani logró embocar un cruce bajo proveniente desde la izquierda para poner el 0-1.

Palmeiras parecía no poder consolidar una idea clara para buscar revertir la situación y le ponía las cosas muy cómodas a sus rivales, a los que les bastaba con mantener la calma y la solidez defensiva.

Para el segundo tiempo, los paulistas intentaron mostrar otra cara, pero seguían sufriendo para emparejar las cosas. Eso hasta los 65 minutos, cuando Boca sufrió la expulsión de Marcos Rojo, lo que el equipo de casa sintió como un envión anímico para ir por el empate.

En efecto, la igualdad arribó minutos después con un cañonazo de larga distancia de Joaquín Piquerez que ‘Chiquito’ Romero no pudo contener.

Los brasileños se fueron encima, como era de esperarse, y en el ‘Xeneize’ hubo más malas noticias. El lateral izquierdo colombiano Frank Fabra salió lesionado del terreno de juego, en un momento de suma tensión para su equipo.

Sin embargo, la paridad se mantuvo al final y las cosas se tuvieron que definir con tiros desde el punto penal, tal como ocurrió hace dos décadas en las finales del mismo torneo en las que Óscar Córdoba fue figura junto a sus compatriotas Mauricio Serna y Jorge Bermúdez, en el equipo dirigido por Carlos Bianchi.

Cómo fueron los penales entre Palmeiras y Boca en Copa Libertadores

Cavani, anotador durante el tiempo corrido, desperdició el primer tiro para Boca, pero Romero equilibró tapándole a Veiga el cobro inicial.

Valdez anotó el segundo de Boca y Romero volvió a actuar, atajándole al paraguayo Gustavo Gómez.

Valentini y Figal anotaron los siguientes cobros de Boca, mientras Macedo y Piquerez hicieron lo propio para el ‘verdao’. Todo quedaba en manos de Paul Fernández, que convirtió y desató la locura de ‘la mitad más uno’.

De esta manera, Boca Juniors enfrentará a Fluminense en la gran final continental habiendo llegado a esa instancia gracias a definición por penales en octavos (contra Nacional de Uruguay), cuartos (frente a Racing) y semifinales. El juego se disputará en el estadio Maracaná de Río el próximo sábado 4 de noviembre.